El Banco de Alimentos recauda 110.000 euros en la tradicional recogida navideña. Aunque la campaña ha cambiado este año al formato ‘online’ y ha eliminado la presencia de voluntarios en las grandes superficies debido al coronavirus, la directiva encabezada por su máximo representante, Juan Carlos Fernández Rincón, hace un primer balance positivo y asegura que, a pesar del cambio obligado por las circunstancias de la pandemia, las cifras se mantienen con respecto a los años anteriores. «Ha ido mejor de lo que esperábamos, éramos conscientes de que a la gente podía costarle un poco, era un poco difícil, que no se vieran a los voluntarios nos producía una cierta rareza aunque también era complicado controlar a 1.000 personas era difícil, hemos luchado y estamos en los mismo niveles que en años anteriores», sostiene en declaraciones a este diario.

La campaña sigue abierta en la web www.granrecogidadealimentos.org y se puede seguir realizando donaciones de entre 5 hasta 50 euros hasta el 13 de diciembre. Al respecto, Fernández Rincón asegura que desde el Banco de Alimentos cacereño tienen previsto invertir 60.000 euros de lo recaudado en una primera compra de alimentos básicos que sumarán a las donaciones de empresas y entidades y realizar una primera entrega el 15, 16 y 17 de diciembre. La previsión es llegar a 1.300 familias «para que pasen unas navidades dignas». El remanente se destinará a abastecer a esas familias durante los próximos meses.

Precisamente, Fernández Rincón recibió este miércoles a la diputada de Políticas Sociales, Amelia Molero, en las instalaciones de Aldea Moret para mostrar la labor del banco en la sociedad y con el objetivo de enlazar contacto con la diputación para difundir el trabajo de la organización en las localidades de la provincia. «No queremos que haya ningún pueblo que por desconocimiento no se ponga en contacto no nosotros y no les lleguen alimentos».