La banda de la Sagrada Cena podría independizarse de esta cofradía el próximo año y cambiar de nombre, según declaró ayer su director y fundador, Pepe Cantero, debido a una serie de circunstancias. Precisamente, la Sagrada Cena acaba de escindirse de la Unión de Cofradías --formada ahora por once hermandades-- a causa de las diferencias que mantiene desde hace años, y se ha convertido en hermandad sacramental.
"Yo no sé quién tendrá la culpa, pero si once se llevan bien y uno no se entiende con esos once, algo ocurre. Sólo sé que a la banda le salpica la situación. De hecho, este año podíamos tocar con otras cofradías, los Ramos y las Batallas, y el tema se ha paralizado", explica. Al menos, la banda ha sido invitada por la unión para acudir a Sevilla.
Cantero asegura que los 35 chavales, de 10 a 20 años, ensayan a diario en el Paseo Alto con sol, lluvia "y un frío extremo". "Lo único que desean --agrega-- es tocar en Cáceres, pero al margen de las procesiones de la Sagrada Cena sólo nos invita el Humilladero y el municipio de Alcuéscar. Algún otro pueblo se ha echado atrás por el mismo tema".
El director afirma que la banda es autónoma, si bien la Sagrada Cena adquirió los instrumentos. "Los chavales unen lo que ganan para cubrir gastos, pero las asignaciones de la cofradía tampoco son brillantes. El año pasado nos quejamos y ahora ni siquiera estamos invitados a su certamen anual de saetas".
