Barcelona también tiene su Aldea Moret particular en el Poblenou, un barrio industrial que está transformando desde el 2000 en un innovador distrito en el que conviven nuevas empresas punteras y viviendas en edificios industriales gracias al proyecto 22Barcelona.

Impulsado por el ayuntamiento a través de una sociedad municipal, las cifras oficiales de esta iniciativa sorprenden por su magnitud: 180 millones de euros de inversión para un plan de infraestructuras en un ámbito de casi 200 hectáreas, cerca de 1.000 empresas ya instaladas o en proceso con más de 32.000 nuevos empleos y 145.000 metros cuadrados en equipamientos y 114.000 destinados a zonas verdes.

Pero la verdadera importancia radica en la transformación de este barrio industrial del centro de Barcelona, motor económico durante más de cien años, en un nuevo modelo para la producción, formación e investigación, que incluye viviendas tradicionales, lofts en edificios industriales rehabilitados y apartamentos de alquiler temporal vinculados a empresas y hoteles. El plan desarrolla 40 proyectos punteros en sectores como el audiovisual o la tecnología médica.

De esta forma, el plan 22 establece que los propietarios del suelo, para poder agotar sus derechos edificatorios, deben participar en proyectos de renovación urbana en una proporción no inferior al 20%. Con esta medida se pretende incentivar la presencia de actividades innovadoras en convivencia con el comercio tradicional del barrio. El proyecto también prevé que un 10% del suelo transformado pase a ser de titularidad pública y sea destinado a dotaciones.

Convertir el Poblenou en un polo de atracción para empresas y vecinos también se está canalizando a través de mejoras como nuevas redes de fibra óptica, electricidad e internet sin hilos, además de un plan para que, a partir del 2010, el 70% de las personas se desplacen a esta zona en transporte público o utilizando una red de 29 kilómetros para bicis.