Todos los locales de copas de la zona de la movida que quieran cambiar su licencia de bar a bar especial ya pueden hacerlo. En el momento en que se formule la petición, el ayuntamiento resolverá el trámite en menos de un mes, lo que permitirá a los establecimientos cerrar una hora más tarde.

Así lo confirmó ayer el concejal de Seguridad Ciudadana, Teodoro Casado, tras la reunión que mantuvo con los representantes de la Asociación de hosteleros de la plaza Mayor, La Madrila y la calle Pizarro, Plamapi, y en la que también estuvo presente el jefe de la Policía Local, César García.

Según anunció Casado, a partir de hoy los empresarios solicitantes recibirán por escrito las condiciones que deben cumplir para ser bar especial y el compromiso del ayuntamiento es facilitarle la nueva clasificación "en el menor tiempo posible", dijo el edil.

LOS PLAZOS

Los locales, una vez hayan recibido las condiciones que deben cumplir, tendrán un periodo de 15 días para presentar la documentación que se les pide y para poder solucionar las posibles deficiencias. En ocho o 10 días conseguirán el cambio de licencia.

Esto implica que dentro de tres fines de semana, muchos de los locales de copas alargarán su hora de cierre. Hasta ahora, aunque gran parte de ellos cumplían las condiciones de bares especiales, estaban catalogados como bares normales, lo que restringía su horario. Un bar normal debe cerrar a la 01.30 y uno especial a las 2.30. Los viernes, sábados y vísperas de fiesta los horarios de terminación y cierre podrán prolongarse media hora más.

Hasta el momento, han solicitado el cambio de licencia 21 locales, ocho ubicados en la calle Pizarro, seis en La Madrila y siete en la plaza Mayor.

El asesor jurídico de Plamapi, Celestino García Mateos, recordó que la mayor parte de los locales que forman parte de este colectivo, cumplen los requisitos para ser bares especiales y volvió a recordar las pérdidas que hasta el momento han sufrido por la guerra horaria. "Algunos no sacan ni para pagar la renta del local". La medida municipal, según él, los salva de la ruina.