Los vecinos de Aldea Moret afectados por la plaga de pulgas y garrapatas que padece el barrio desde hace dos semanas solicitarán por escrito al ayuntamiento que fumigue las calles, después de que desde el consistorio se informase que no se contaba con ninguna petición formal para ello, necesaria para actuar.

Tras denunciar la situación a este diario, José Luis Pardo, uno de los residentes afectados que asegura que informó del problema a Conyser vía telefónica, ha acordado con el resto de vecinos presentar, entre hoy o mañana, un escrito en el registro del consistorio. También podrían hacerlo a través de la concejalía de Medio Ambiente o en la Inspección de Servicios.

"Lo único que queremos es que vengan cuanto antes a fumigar las calles, que podamos salir de casa tranquilos y sentarnos al fresco por la noche sin que nos coman las pulgas", apuntó ayer Pardo, que vive en el número 12 de la calle Golondrina, una de las, al menos, ocho vías afectadas por la plaga, junto con la calle Perdiz, Alondra, Paloma, Tórtola, Cigüeña, Jilguero y Canario. No obstante, los vecinos denuncian que las pulgas y garrapatas se extienden por más zonas.

En ese sentido, el ayuntamiento reiteró a este diario que, a fecha de ayer, todavía no se había recibido ninguna notificación o petición formal de actuación en Aldea Moret. Por ello, lo primero que deben hacer los vecinos es comunicarlo por escrito siguiendo el procedimiento habitual en estos casos. Una vez notificado el problema, el consistorio deberá evaluar si existe realmente una plaga y, en el caso de que la hubiera, se procedería a analizar la manera de actuar sobre ella.

El ayuntamiento dispone de un servicio especial para este tipo de casos. Expertos en plagas de la empresa Conyser han trabajado tiempo atrás en fumigaciones y procesos de desinfección en inmuebles como el restaurante Wok o el colegio Extremadura, éste último debido a una plaga de murciélagos que afectó al centro educativo hace dos años.