El servicio municipal de limpieza viaria sufrirá una reordenación significativa que afectará especialmente a La Cañada, Nuevo Cáceres, Cabezarrubia, R-66 A y B, el Vivero, La Mejostilla y los Castellanos, donde la recogida de la basura se realizará en horario diurno. Pero la modificación tendrá una incidencia mayor que repercutirá en todo el sistema de eliminación de residuos, ya que está previsto que en el 2004 esté en ejecución una planta de separación de desperdicios y reciclaje, que transformará la materia orgánica en abono y que tendrá unos 50 operarios.

Estos cambios, que fueron presentados ayer por la concejala Belén Lozano y que el pleno de la corporación aprobará el día 13, se producen por dos motivos. El primero es la modificación del contrato de concesión de la recogida de basura entre la empresa Conyser y el consistorio para incorporar nuevos servicios, entre los que destaca la creación de una brigada de choque y la adquisición de dos vehículos de carga lateral de contenedores, que es lo que motiva el cambio de horario y la instalación de 157 contenedores de capacidad superior que permitirá la retirada de 406.

NUEVA PLANTA DE TRATAMIENTO

Los cambios que se introducen en el contrato tendrán un coste anual de 500.000 euros, y, por ahora, la oposición no es partidaria de esta variación, que se produce cuando faltan dos años para que acabe la actual concesión.

El segundo motivo es la adhesión del ayuntamiento al plan director de residuos de la Junta, que supone, además de la nueva planta, la colocación de contenedores para cada tipo de materia: orgánica e inorgánica, que, a diferencia de lo que ocurre ahora, no podrá mezclarse. El consistorio también se adhiere a los convenios con Ecoembes y Ecovidrio, sociedades que pagarán un canon por reutilizar los residuos. Con estos acuerdos, el ayuntamiento ahorra 52.000 euros/año.