Jóvenes de 20 a 22 años que van a la plaza Mayor y La Madrila. Ese es el perfil habitual de las personas que ingresan en los centros hospitalarios de la ciudad como consecuencia de intoxicaciones etílicas. De las cifras aportadas a este diario por la Cruz Roja y el servicio de Urgencias del Hospital San Pedro de Alcántara, destaca el aumento de casos entre mujeres jóvenes.

En lo que va de año, la Cruz Roja de Cáceres recibió en la provincia 114 avisos por intoxicaciones, atendió 109 y evacuó a 69 pacientes. La mayor parte de estos avisos se produjeron en la capital cacereña, donde se alcanzó la cifra de 79. De ellos, se atendieron 74 y se trasladó a un total de 51.

Fuentes de la asamblea local explican que una vez que se recibe el aviso, una ambulancia se traslada al lugar del suceso. En ocasiones se trata de falsas alarmas y el afectado no se encuentra en una situación tan grave como en principio se pensaba. Cuando es necesario, los voluntarios atienden al joven. Si observan que la situación es grave, lo trasladan al servicio de urgencias que esté más próximo.

LAS PREFERENCIAS

El jueves y la madrugada del sábado al domingo concentran las peores borracheras. Responsables de Cruz Roja indican que las intoxicaciones más frecuentes suelen darse entre las 20.30 y la medianoche, aunque en la franja que llega hasta las seis de la madrugada también se producen casos. A primera hora la mayor parte de intoxicaciones se detecta en la plaza y en edades que oscilan entre los 18 y 20 años. A medida que avanza la noche, el número desciende, aumenta la edad y los avisos provienen de La Madrila.

Francisco Corcho, jefe de Urgencias del San Pedro de Alcántara, incide en que de unos años a esta parte se ha observado un aumento de casos entre las mujeres y un descenso importante del número de intoxicaciones en menores de edad. "Hace un tiempo tuvimos un boom de chiquillos de 13 y 14 años, que ahora es muy inferior", señala Corcho.