A sus 23 años ha recorrido tres universidades para desvelar todos los misterios de la ayahuasca, la planta sagrada que utilizan los chamanes de la amazonia colombiana y de los ejes cafeteros para reconocerse espiritualmente y descubrir su yo interior y el de sus ancestros a través de un rito espiritual que ha llegado a los núcleos urbanos y que también tiene presencia en España.

El cacereño Segundo Tercero Iglesias, estudiante de Antropología de la Universidad de Extremadura, consiguió una beca de la Agencia Española de Cooperación Internacional que posibilitó su llegada la universidad colombiana de Caldas. De la mano de Jorge Ronderos, profesor titular de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de Manizales, Tercero inició una interesante investigación en torno al chamanismo y los enteógenos.

El chamanismo es una práctica cultural aborigen que existe desde tiempos inmemoriales. Los indígenas, aborígenes americanos, utilizan los enteógenos (sustancias psicoactivas y naturales como la ayahuasca) para realizar rituales en sus comunidades.

Ya en Colombia, Segundo Tercero se incorporó al taller de Cultura y Droga, que coordina su compañera Mónica Ciro, y para el que ha trabajado de manera intensa durante tres meses. "Mi misión --subraya el cacereño-- era realizar un trabajo de campo sobre la presencia del yahé o ayahuasca, una planta sagrada de los pueblos indígenas que se utiliza hace muchísimos años y que es fundamental en la forma de vida de esas comunidades".

LA LLEGADA A LA CIUDAD

Pero la línea más destacada de esta investigación radica, sin duda, en que el yahé tiene presencia en los contextos urbanos. Para ello, Tercero realizó numerosas entrevistas, observaciones participativas, estuvo en las tomas de este tipo de sustancias...

Existe, pues, un sector urbanita que utiliza estas plantas con un fin lúdico y recreativo, aunque para la mayoría sirve como camino de experimentación y medio para el conocimiento de sí mismo. Gracias a la ayahuasca, el individuo recupera la memoria antigua. La sustancia interconecta zonas del cerebro y hace posible reencontrarse con el pasado.

Pero el pasado no siempre gusta a todos. Por eso hay muchas personas que prefieren no experimentar sensaciones nuevas. "Uno llega a enfrentarse consigo mismo y con sus miedos. Ves a tus fantasmas y te enfrentas con lo que muchas veces has reprimido e intentado ocultar".

Aunque los chamanes siguen sirviéndose de la ayahuasca como utilidad curativa y una medicina tradicional alternativa a la occidental, lo cierto es que en Europa se produce un sentimiento individualista que ve en el yahé una vuelta a la naturaleza.

Los estudios realizados por Tercero le han servido para marcharse a la Universidad Complutense de Madrid, donde realizará su doctorado en Antropología y seguirá trabajando para que las universidades extremeña, colombiana y madrileña intercambien experiencias relacionadas con una planta ancestral, misteriosa y espiritual que nace en el Amazonas pero que tiene vigencia en la moderna sociedad del siglo XXI.