Diez años de prisión y la prohibiciones de volver al lugar donde resida su exmujer y comunicarse con ella por cualquier medio durante cinco años son las penas a las que se enfrenta un vecino de Madrigalejo que hoy será juzgado en la Audiencia Provincial.

Al procesado, P. L. G. M., se le imputan un delito continuado de abuso sexual, en la persona de su esposa, por el que la acusación particular solicita se le impongan las penas antes citadas; así como dos faltas de coacciones e injurias, solicitando por cada una de ellas cuatro arrestos de fin de semana. También se solicita una indemnización de 15.000 euros.

Los hechos por los que P. L. será hoy juzgado ocurrieron en el domicilio familiar y cuando aún estaban casados. Según la acusación, la mujer de P. L. "sufrió reiterados acometimientos sexuales por parte del acusado, todos en contra de la voluntad de ella".

Ya en junio del 2000 la mujer inició los trámites de separación, "momento a partir del cual ha venido sufriendo un continuo acoso por parte del acusado, que la persigue y profiere expresiones insultantes, llegando incluso a ofrecerle dinero por mantener relaciones sexuales con él".