El ayuntamiento ya ha puesto en marcha el plan contra los atropellos aprobado hace menos de un mes, cuando la ola de accidentes en pasos de peatones hizo saltar las alarmas. El mes pasado hubo cuatro en diez días, uno de ellos mortal. Ocurrió en la avenida de la Hispanidad, en el paso de peatones ubicado junto a la entrada por la que los autobuses acceden a la estación. El conductor, que tal y como recoge el informe de atestados de la Policía Local circulaba a una velocidad por encima de la permitida, no vio a la víctima y la arrolló, desplanzándola unos diez metros y empotrándola contra otro vehículo estacionado en esa calle. La víctima era María José Ojeda Pavón, una joven de 25 años natural de Montánchez. Los otros tres atropellos, con consecuencias leves, ocurrieron en San Blas, en el Vivero y en la calle Gabino Muriel.
Tras lo sucedido el ayuntamiento, la Jefatura Provincial de Tráfico y la Policía Local aprobaron un plan con una decena de medidas que ayudaran a frenar estos siniestros y a tranquilizar a los cacereños. Lo primero que se ha llevado a cabo ha sido el traslado de los contenedores que restaban visibilidad a los conductores, al encontrarse junto a los pasos de peatones o encima de ellos. La empresa encargada de la limpieza en la ciudad, Conyser, ya ha movido los contenedores de 41 calles de Cáceres.
Esta era una de las medidas a desarrollar más urgentes. Por el momento se han revisado los basureros del R-66, El Vivero, Castellanos, Macondo, El Junquillo, Casta Plata, Maltravieso, Nuevo Cáceres, La Cañada, Aldea Moret, Río Tinto, Cabezarrubia, Vistahermosa y San Francisco, aunque el análisis no ha terminado aún y continuará hasta finales de mes, con el objetivo de tener cambiados todos los contendores que estorben antes de final de año.
CALLES AFECTADAS / Se han visto afectados los de la calle Colonia y los del colegio Licenciados Reunidos, que se han trasladado a la calle Londres; los de la calle Dionisio Acedo, que se han llevado enfrente junto a un descampado, y dos paradas de la calle Argentina, en un caso se han movido más abajo y en otro se han trasladado a Sanguino Michel. Los de Picos de Europa están ahora en Monfragüe, los de Doctor Fleming más abajo de donde se situaban habitualmente, los de la plaza de toros se han subido al acerado, los de Lima se han puesto enfrente y los de Isla de Córcega se han llevado a Islas Filipinas.
Además se ha modificado la ubicación de los que se encontraban colocados en San Ignacio, Agustina de Aragón, Concepción Arenal, plaza de Andalucía, calle Roma, Amberes, París, Manuel Álvarez López, Pedro de Ibarra, Hispanidad, Héroes de Baler, Cuatro Lugares, Magaritas, Castelar, Berna, Cuesta de la Reina, Florencia, Roche Sur Yon, Juan Sebastián Bach, Isabel de Moctezuma, Los Halcones, Las Águilas, Miguel Ortiz, Cordel de Merinas, Padre Nicanor, Aureliano Buendía, José Arcadio, Octavio Paz, Ordesa, Isla de Córcega, avenida de Los Miliarios y Cueva de Lacaux.
No se descarta que haya más modificaciones en los contenedores de otras calles de la ciudad, ya que, según indicó el ayuntamiento a este diario, Conyser sigue con las actuaciones para tener todo revisado y cambiado antes de final de año. «Es es un trabajo importante, pero con el objetivo de mejorar la seguridad vial, como se ha comprometido el equipo de gobierno», añadió.
otras actuaciones / La otra actuación acordada para frenar los atropellos que se comenzará a materializar en breve es la colocación de semáforos inteligentes en las avenidas de La Hispanidad, Virgen de la Montaña y Virgen de Guadalupe, las más conflictivas de la ciudad. Estos semáforos detectan cuando un peatón está ya dentro de la calzada y avisa mediante un luminoso al conductor de que un viandante está pasando por él. La luz estará ubicada en los pasos de peatones. Las obras para instalar estos semáforos comenzarán en enero.
El resto de actuaciones, que irán poniéndose en marcha en los próximos meses, consisten en la poda de los árboles junto a los pasos de peatones, la colocación de radares fijos en los lugares conflictivos (se baraja la posibilidad de ponerlo en La Hispanidad), la instalación de paneles fluorescentes en las cercanías de los colegios y el cambio de la avenida Virgen de Guadalupe, donde se mantendrán los carriles de tráfico como hasta ahora y se ensancharán las aceras, con el único objetivo de que el peatón gane más espacio del que ahora tiene.
Cuando ocurrió el atropello mortal en La Hispanidad se barajó también la posibilidad de reducir la velocidad de este tramo de la avenida a 30 kilómetros por hora. Sin embargo, por el momento, esta actuación no se llevará a cabo o, al menos, no se contempla en la batería de medidas decidida por la Jefatura Provincial de Tráfico y la Policía Local.
ZONA 30 / Ya es zona 30 el tramo de la avenida de La Hispanidad que transcurre entre la rotonda de Nezahualcóyotl (el indio) y la ronda de San Francisco. Se instauró en el año 2014, precisamente tras sufrir esta calle varios atropellos durante el verano.
En el año 2015 pasaron por los controles de velocidad que la Policía Local realiza en esta calle (a menudo coloca un radar mó-vil en la zona) 12.131 vehículos, de los que solo rebasaron el límite permitido 150, según los datos ofrecidos por el ayuntamiento. El porcentaje es aún más bajo si se tienen en cuenta los datos de los primeros seis meses de este año, cuando han sido controlados 16.205 coches, de los que solo superaban la velocidad 61. El número de infractores no llega ni al 1% de los controlados.
Otra de las actuaciones que se llevó a cabo en esta avenida tras los atropellos ocurridos en 2014 fue la colocación de pasos de peatones asimétricos. Al ser más anchos amplían el tiempo de reacción y de frenada del vehículo por los conductores. Tienen cuatro metros de ancho extra en cada uno de los carriles, en el sentido en el que circulan los coches. Por esta longitud extra, denominada ‘zona de riesgo’, no pueden cruzar los viandantes, de hecho esto puede sancionarse. La avenida tiene quince pasos de cebra, de los que cuatro son asimétricos: los de los colegios Donoso Cortés y Moctezuma, el más próximo a la estación de autobuses y el del número 37 de la avenida.
