Los datos sobre cómo queda el futuro diseño de la ciudad se fueron concretando ayer. La propuesta aún no es definitiva, pero da una idea de cómo serán las reglas de juego para la expansión de Cáceres a partir de la mitad del 2009, cuando entrase en vigor el nuevo Plan General Municipal (PGM) de Urbanismo. Lo primero a destacar es que las zonas por donde inicialmente crecerá Cáceres son el ferial (al sur de Casa Plata y de la Charca Musia) y en los bordes de la carretera de Salamanca. El otro dato que resalta es el recorte en las grandes zonas verdes de la Montaña y la Sierrilla. Se quitan unas 300 hectáreas (102 son de la Montana y 137 pertenecen a la Sierrilla, donde hay otras 62 que tampoco están entre los sistemas generales a mantener). La rebaja está cerca del 70%.
Estos datos se conocieron en la comisión local de Urbanismo que se celebró ayer, órgano que está concretando desde la pasada semana cómo reajustar el nuevo plan a las objeciones planteadas por la Junta, que tiene que dar la aprobación definitiva al plan y que suspendió su tramitación el pasado febrero. El PGM necesita que primero se apruebe corregido por el consistorio y para eso hay dos posibilidades: un acuerdo entre PSOE-PP, algo muy improbable, o que disponga del voto de PSOE, FC e IU. Los dos primeros son más favorables a sacar el plan en línea a los reajustes planteados, pero IU, aún reconociendo el avance logrado, todavía no da el ´si´ a lo que se pone sobre la mesa.
El nuevo plan de urbanismo planteaba inicialmente una reserva de futuros suelos urbanizables con un potencial de 54.600 pisos, además de 440 hectáreas en la Montaña y Sierrilla destinadas a espacio verde público a obtener por el consistorio y que se calificaban como sistemas generales adscritos a esos suelos urbanizables. Un ajuste de uno de los dos afecta al otro. La Junta precisó que ambas cantidades se tienen que rebajar. Y eso es lo que está realizando la comisión.
Esto se hace partiendo de una idea distinta de cómo debe crecer la ciudad. Frente a un modelo para un desarrollo a largo plazo, aunque con unas prioridades especificadas, del anterior ejecutivo municipal, se pasa a una planificación de desarrollo a medio plazo, a 15 años vistas, que es lo que se está poniendo sobre la mesa, y se realiza, entre otras razones, porque las condiciones socio-económicas varían y las circunstancias del 2008 pueden ser muy distintas a las del 2023.
Las observaciones de la Junta y el cambio de criterio en el modelo de desarrollo explica la planificación de futura vivienda y sistemas generales que se está planteando ahora. Así se pasa de una previsión de 54.595 viviendas en suelos clasificados como urbanizables a otra de 29.196. La primera cifra se sabía que no se iba a alcanzar, pero dejaba el suelo donde se planificaban como urbanizable con prioridades en su desarrollo (dependían en la mayoría de los casos de que se aprobase su consulta de viabilidad). La segunda cifra sale de recortar los suelos urbanizables, los sistemas generales, las densidades y los aprovechamientos de los sectores de terrenos urbanizables.
LA DISTRIBUCION Esa previsión de 29.196 nuevas viviendas está dividida en tres prioridades para su desarrollo. En una primera se reservaría terreno para 11.976 viviendas. Son los sectores más atractivos, ya que son los primeros por donde tiene que crecer Cáceres. En un principio estos sectores eran cinco. Los que salen son los terrenos que están detrás de Renfe y el sector que se encuentra entre Ronda y Gredos y la carretera de Casar.
Los tres sectores que permanecen como primeros son el del ferial, debido a que del mismo depende que se pueda ampliar todo el recinto de ocio, y dos sectores que están junto a la carretera de Salamanca: el que está entre Los Castellanos y Macondo y Capellanías y el que se sitúa frente a Capellanías y la estación de servicio de Montebola, esta parte de este último sector es la más alejada del centro entre los suelos urbanizables más prioritarios. Estos 3 sectores sumaban 12.843 viviendas antes del recorte y con el reajuste quedan en 11.976.
Para una segunda prioridad se deja un previsión de 9.119 pisos que están repartidos entre ocho sectores, que están situados detrás de Renfe, cuyo desarrollo va a quedar condicionado a la integración del AVE; junto a la carretera de Trujillo y el campus, aquí se encuentran otros 2 sectores de los más alejados del centro: el que está al otro lado de la prisión, en dirección a Trujillo, y el situado enfrente; y la mitad sur del sector que está entre Ronda y Gredos y carretera de Casar. Todos estos sectores sumaban más de 11.300 viviendas antes de los recortes y quedan con 9.119.
Para la tercera prioridad se mantiene una previsión de 8.101 pisos, que se reparten en 3 sectores: al sur y sureste del ferial, junto la carretera de Mérida (en la mina de la Esmeralda), donde se desestimó una iniciativa de la Ley del Kilómetro de la Junta a causa, entre otras razones, de los valores ambientales del suelo, y la otra mitad del sector que está entre Gredos y carretera de Casar. En estos tres sectores se permitían 14.081 pisos antes del recorte y ahora quedan con 8.101.
Del documento inicial del plan desaparecen varios sectores: los de prioridad a muy largo plazo (junto a Sierrilla y al lado del polígono industrial de Mejostilla); los dos sectores que estaban al suroeste de Aldea Moret y el que se encontraba al sur del Junquillo, estas tres zonas están condicionadas por el futuro trazado del AVE en su integración en Cáceres; y el sector que está por fuera de la ronda supernorte y al norte del campus.
Todos estos números son, por ahora, provisionales. De hecho ya ha habido una variación entre el martes pasado y ayer. Hace una semana la previsión de viviendas era de 27.500, con un recorte de 27.000, y ayer era de 29.196, lo que deja el recorte en 25.400 sobre las 54.595 iniciales.
LA MONTAÑA Si los recortes en la previsión de viviendas han sido de la mitad, en los sistemas generales de Montaña y Sierrilla son de casi el 70%. El plan general establecía que 157 hectáreas de la Montaña pasasen a ser sistemas generales --zonas verdes-- adscritos a suelos urbanizables (significa que el ayuntamiento los recibe a cambio de compensar a sus propietarios con edificabilidad en los sectores donde se pueden edificar viviendas).
Esas 157 hectáreas se dividían en 130 en la prioridad primera y 27 en la dos. La propuesta que ayer se presentó deja 55 hectáreas en la prioridad uno, eliminando todo el suelo que está por encima de la ronda este y el terreno junto a la subestación de Iberdrola. En Sierrilla se planificaban 284 hectáreas como sistemas generales adscritos a suelos urbanizables. En la propuesta se dejan las 85 de Sierrilla que estaban en la prioridad primera, su límite sur es la ronda norte, y se quita el resto.
De los terrenos que se eliminarían en la Montaña, más de la mitad son del colectivo de propietarios de la Umbría y la Solana de la Montaña, que ha mostrado su disposición a requerir al Tribunal Supremo que se cumpla con todas sus consecuencias la sentencia del residencial Universidad (fallo que anula la orden de la Junta que permitió construirlo) si se recortaban parte de sus terrenos incluidos en la previsión inicial del plan.
