El IBI urbano subirá en 2020 en 41 municipios de la provincia, entre éstos los principales son Plasencia, Malpartida de Cáceres y Miajadas. En Cáceres no habrá cambios. Tras las bajadas de 2018 y 2019, el año que empieza se mantiene sin variaciones en el principal impuesto que recauda el ayuntamiento de la capital. No es el único caso, ni en el resto de impuestos ni en las principales tasas habrá modificaciones. El recibo del IBI urbano de 2020 será en Cáceres el mismo que se puso al cobro en el año 2019.

El Ministerio de Hacienda publicó el pasado sábado en el BOE la relación de municipios en los que se aplicará en 2020 la actualización de los valores catastrales, revisión que incide en lo que el ciudadano paga de IBI. El incremento de los valores catastrales en los 41 municipios cacereños estará entre el 3 y el 5%. En la mayoría, como es el caso de Plasencia o Miajadas, será del 3%.

Los dos elementos que determinan el importe del IBI urbano son el valor catastral y el tipo impositivo que sobre el mismo aplica el ayuntamiento. Tocando uno u otro se puede bajar o subir el impuesto. Los ayuntamientos pueden modificar directamente el tipo o solicitar a la dirección general del Catastro una revisión de los valores que se tiene que ajutar a los porcentajes que se establezcan para cada año.

El Ayuntamiento de Cáceres no pidió en 2019 la revisión de los valores catastrales, tenía de plazo hasta el pasado 31 de julio.

La última vez que la pidió fue en 2015, aunque entonces no tuvo ningún efecto. Se solicitó por el gobierno local pensando que la actualización sería del 1,10% cuando el aumento era del 10%. Esa revisión se tuvo que llevar a la práctica, ya que el ayuntamiento se percató de la equivocación una vez publicada la orden del Ministerio de Hacienda, pero para evitar que tuviese efecto en el recibo se rebajó el tipo impositivo en el mismo porcentaje.

El IBI urbano es el principal recurso del ayuntamiento. Es el tributo que genera más ingresos, un tercio del total de los que presupuesta el consistorio proceden del IBI urbano. El gobierno local socialista de Luis Salaya no ha querido introducir modificaciones en este tributo en su primer presupuesto, el de 2020, pese a que se ha quejado por el recorte que se ha producido en la recaudación de este impuesto por las bajadas aplicadas en 2018 y 2019 tras el acuerdo alcanzado entre el PP y Cs en 2017 y que ha dejado el tipo impositivo en el 0,70%.

El gobierno puede negociar o intentar aplicar una nueva revisión para el ejercicio de 2021. La revisión de la ponencia de valores (procedimiento de valoración colectiva de carácter general), la de Cáceres es de 1995, es una posibilidad planteada por Unidas Podemos en las negociaciones que mantiene con el ejecutivo socialista.

PREVISIÓN DE INGRESOS / El gobierno local ha presupuestado de IBI urbano unos ingresos de 22,7 millones de euros en 2020, es medio millón menos que lo que se preveía en el borrador de los presupuestos de 2019, que no se llegaron a aprobar, y es prácticamente la misma cantidad que en 2018, cuando inicialmente se estimaron unos ingresos por valor de 22,8 millones. Ese año, el último con liquidación aprobada, se llegaron a reconocer derechos por este tributo por importe de 22,9 millones, aunque al cierre del año solo se tenía una recaudación neta de 20.1 millones, quedaban pendientes de ingresar 2,7 millones (la liquidación de 2019 no se hará pública hasta finales del primer trimestre de 2020).

El tipo impositivo se ha ido modificando en los últimos 25 años. En 1995 era del 0,37% del valor catastral del inmueble. La última subida importante se produjo en 2012, entonces subió hasta el 0,82% -el valor más alto que ha tenido- por la aplicación del real decreto ley de medidas urgentes en materia presupuestaria.