Según las estadísticas una de cada tres mujeres y uno de cada diez hombres padecen osteoporosis. Pero no se alarmen. Eso es en el mundo, porque en Cáceres no existe tal enfermedad.

¿A qué se debe? Ya saben que para controlar el calcio causante de esta enfermedad que está en el origen de caídas, roturas y problemas lumbares existe un procedimiento llamado densitometría ósea. Pues en Cáceres no existe ese servicio en el Servicio Extremeño de Salud, pero como en Badajoz sí existe, algunos pensaban que la causa era la composición del agua, pues no todo iba ser malo en nuestro agua.

Los Catovis pensaban que se debía a la intercesión de la Virgen de la Montaña. Nada de eso. Se debe a que lo ha decidido la Consejería de Sanidad.

Con frecuencia ginecólogos y médicos de atención primaria la prescriben porque no se han enterado de que esa enfermedad no existe aquí en Cáceres. Ahora bien, si el paciente, el paciente cacereño naturalmente ( qué adjetivo tan adecuado para los cacereños este de "paciente"), desea conocer los niveles de calcio de su osamenta, el SES piensa que es un capricho porque esa enfermedad no existe aquí y no tiene más remedio que pagarlo de su bolsillo, mientras que al de Badajoz se lo hace gratis el SES porque allí es una enfermedad. Que se fastidien los de Badajoz.