Pablo Vioque llegó a Vilagarcía de Arousa hace veinte años, tras pasar por Murcia, donde terminaría sus estudios en la Facultad de Derecho y adonde tuvo que marchar, al parecer, por desavenencias familiares.

Gracias a su don de gentes y simpatía, este entonces joven abogado logró hacerse un hueco dentro del organigrama de la Cámara de Comercio de Vilagacía, donde llegó a ocupar el cargo de secretario. Previamente, ya había empezado a ejercer la defensa en los tribunales de los principales contrabandistas de tabaco y conocidos narcotraficantes gallegos.

Con el paso de los años y tras sus intentos de incorporarse a la política, bien a través de la extinta Alianza Popular o las filas nacionalistas, sus simpatías con el mundo del narcotráfico le permitieron que se fuera involucrando cada día más en el negocio ilícito. Sobre él pesa hoy una petición de pena de 20 años de prisión por intentar entrar en España un cargamento de 20 toneladas de cocaína que transportaba el barco Dobell , cuya mercancía se perdió en altamar al actuar los agentes de Aduanas. Por otra parte, se le acusa de ser el cerebro de una de los alijos más importantes registrados en España y que fue intervenido en la operación Más Madera , llamado así porque la mercancía se encontró en palés de madera provenientes de Colombia.