Busursa cifró en 8.111.000 euros lo que le adeuda el ayuntamiento por déficit que tuvo el servicio de autobuses urbanos en 2007, 2008, 2009 y 2010. Esta cuantificación la presentó solo unos días antes de que el 31 de enero cediese a Subus el contrato de gestión de los autobuses. Casi la mitad de la deuda se tiene que destinar a Caja Duero, según se precisa en el calendario de pago que Autobuses Urbanos del Sur (Busursa) propuso al ayuntamiento. A la entidad financiera le corresponderían 3.682.000 euros de los 8.111.000 del total de la deuda.

En la propuesta de calendario no se precisa la razón del débito con la entidad. En las negociaciones que ayuntamiento y empresa mantuvieron a finales del pasado año sí se explicó que Busursa endosó parte de la deuda que el consistorio tiene con ella a entidades financieras, que adelantaron a Busursa parte del dinero del débito del ayuntamiento. En la propuesta de calendario presentada por la empresa solo aparece una entidad: Caja Duero.

EL CALENDARIO El calendario que propuso Busursa eran cuatro pagos en tres anualidades. El primero se abonaría en unos meses, cuando el ayuntamiento cobrase el canon del agua. Este primer pago ascendería a 3.744.000 euros para atender la deuda pendiente de los años 2007 y 2008, 3.682.468 euros irían al débito con Caja Duero y el resto, 62.469 euros, a la deuda con Busursa. El segundo pago se abonaría el 31 de diciembre por una cantidad de 1.229.000 euros, que correspondería al 50% del déficit del ejercicio de 2009. El tercero sería un año después, el 31 de diciembre de 2012, por 1.229.000, el resto del déficit de 2009.

El último pago se haría el 31 de diciembre de 2013 por el déficit de 2010, que se cuantifica en 1.906.441 euros. La deuda por la liquidación del pasado año debe ser menor que la de 2009 porque el ayuntamiento ha ido entregando más dinero a cuenta del déficit de 2010, cantidades que permitieron pagar las nóminas.

Por parte del gobierno municipal no se ha hecho público el calendario ni tampoco si se aceptaron todas las condiciones que ha propuesto la empresa, solo se ha indicado que la deuda estaría en torno a 8 millones y que el pago se efectuaría en tres años.

No obstante, el destino final de parte del dinero puede cambiar desde el momento que la Seguridad Social está dictando embargos preventivos sobre los pagos que el consistorio hace a Busursa, empresa que tiene impagos con la Seguridad Social desde 2008 por un millón (230.000 euros ya están retenidos del último pago mensual que el ayuntamiento hizo a Busursa con cargo a enero, su último mes al frente del servicio). El próximo abono a Busursa se haría en unas semanas cuando esté el canon.

La retención de esos 230.000 euros y las perspectivas de que los empleados tardarían meses en cobrar enero llevaron a intentar una solución urgente.

El pasado miércoles los delegados sindicales de UGT en el servicio pidieron a la alcaldesa una reunión inmediata y antes del jueves, cuando se iban a comenzar a tramitar las reclamaciones de los trabajadores ante magistratura para intentar cobrar de Busursa o, en último caso, del fondo de compensación.

El jueves se ordenó un nuevo pago por parte del ayuntamiento, cambiando el concepto para evitar su retención, para que los trabajadores cobrasen enero.

Además de la relación Busursa y ayuntamiento, está la de Busursa y Subus, la nueva empresa del servicio pagó una cantidad a Busursa, que no se ha hecho pública, parte podría corresponder a los activos del servicio (vehículos y otros) que quedan por amortizar y que Busursa cuantificó en 3 millones.