El nivel de los trihalometanos en el agua que se consume en Cáceres sigue en unas cantidades que desde el 1 de enero del 2009 no estarán permitidas, según los parámetros que se establecen en el real decreto que regula los criterios sanitarios de la calidad del agua. En la mayoría de los análisis hechos a lo largo de este año se han obtenido unos resultados que están en niveles actualmente autorizados, pero que en poco más de un año quedarán fuera.

Todo lo anterior no significa que hoy haya riesgo para la salud por consumir agua del grifo, pero sí supone que en casi dos años no se ha hecho nada que sea efectivo para rebajar el nivel de los trihalometanos con el objetivo de irse adaptando al nuevo límite reglamentario. Fue en febrero del año 2006 cuando se empieza a hablar de los trihalometanos a partir de un estudio nacional de la Organización de Consumidores y Usuarios.

Los trihalometanos son sustancias químicas que aparecen en el agua al tratarla en la planta potabilizadora y surgen como consecuencia de la reacción de la materia orgánica que tiene el agua bruta (sin tratar) al entrar en contacto con el cloro que se utiliza para su depuración. En el real decreto se establece un límite para los trihalometanos que es de 150 microgramos por litro, una cifra que se recortará hasta los 100 microgramos a partir del 2009, según se indica en el real decreto que es del año 2003.

Los resultados han sido superiores a 100 en la mayoría de los análisis que se han realizado del agua durante el 2007. Una de las pocas excepciones se dio en julio, en un análisis de agua cogida a la salida de la depuradora que dio 73 microgramos por litro. En casi todos los demás análisis se ha pasado de cien. En las últimas evaluaciones, las del pasado mes de noviembre, se obtuvieron 114 y 105 microgramos/litro en las muestras recogidas en la estación depuradora, 137,4 en las del depósito del Cerro de los Pinos, y 137 y 119 en las cogidas en la red, en la plaza Marrón, el primero de los resultados, y Mejostilla, el segundo.

EL AYUNTAMIENTO Aunque en las últimas semanas se ha hablado más de la nueva conducción desde Portaje, también ha habido alusiones al nivel de los trihalometanos. La alcaldesa, Carmen Heras, comentó que en los presupuestos del 2008 habrá dotación económica para que se reduzca su nivel. Había una partida en el presupuesto del 2007, que no se ha llegado a materializar. Esta no es la única cuestión que está unida a la depuración de aguas que preocupa. La alcaldesa también se ha referido a la situación en la que están determinadas depuradoras. Aunque Heras no ha concretado a qué depuradoras aludía, las que están siendo más problemáticas para el ayuntamiento son las que se construyeron en la cuenca oeste.

Heras tiene previsto hablar de este tema con el presidente de la Confederación del Tajo para disponer de medios para afrontar las mejoras en la depuración.