Crecimos todos juntos, pero no revueltos. En aquellos tiempos de nuestra niñez y adolescencia, la calle de Parras se dividía en dos tramos: la primera desde su final, o sea, la calle de San Antón, hasta la travesía de Felipe Uribarri, y la otra desde esta calleja hasta la confluencia del Barrio Busquet. En la primera podíamos decir que se aposentaban en la proximidad del arandel existente, los mayores integrados por los apellidos Zorita , Chapado , Figueroa , Arribas , Fernández-Ros , etc. y luego veníamos toda pléyade de Zaragoza , García-Monje , Guerrero , Figueroa , Bernáldez , Pantojas y alguno más que en estos momentos no recuerdo.

Nuestro querido amigo Juan Guerrero, 'el melli' fue dentro de su generación el más avanzado. Sin duda alguna fue el primero en tener los escarceos del noviazgo y hasta sus últimos días me decía: 'cómo están, Fernando , las mocingalas'. De carácter jovial y dicharachero siempre me recordaba: "Hay que ver como cambian los tiempos, ¿te acuerdas cuando don León Leal te echó de la Caja de Ahorros? Y ahora, si viera que casi te ponen una alfombra cuando vas a las oficinas". Su hermano Diego , le decía cariñosamente 'el sabio' puesto que según él, todo lo sabía. Los años posteriores a la guerra civil fueron duros, y por aquél entonces poseer una bicicleta era un lujo que no todos podían permitirse. Años después la fotografía caló en la afición de Juan, hasta convertirse en el cronista de la imagen de nuestra ciudad. Su cámara ha recogido múltiples facetas de los acontecimientos más importantes acaecidos en Cáceres durante el pasado siglo y el presente. Juan y yo opinábamos lo mismo a la hora de elegir entre el Cielo y el Infierno, puesto que este último nos recordaba el jardín de las delicias del Bosco . Una vez más, has demostrado tu buen humor con esta decisión. Descansa en Paz.