La comunidad de propietarios de Las Candelas, en la zona del Temis, ha expresado su malestar por la desatención que, a su juicio, sufre por parte del ayuntamiento cacereño. Su presidente, José Luis García Polo, enumeró ayer algunos de los problemas de la urbanización, para la que reclamó inversiones.

García Polo solicitó concretamente al concejal de Tráfico, Santos Parra, --con quien dijo tienen pendiente una entrevista desde hace más de un año-- que estudie la posibilidad de ensanchar el único acceso de la urbanización utilizando terreno del parque del final de la calle Rodrigo Gil Hontañón y ampliando la vía paralela a la residencia Ceres, que da salida a la avenida de la Universidad y a la carretera de la vieja cárcel, que conecta con la Ronda Norte.

Polo afirmó que los conductores tienen graves dificultades a la hora de salir de la urbanización, pues en el cruce la única referencia que tienen es un espejo "que por la mañanas está empañado y no se ve nada". A esto se suma el elevado número de coches que soporta la zona --muchas veces mal estacionados-- por su cercanía con una clínica sanitaria. Además, denunció los múltiples baches que adornan las calles y la escasa señalización vial, con pasos de cebra "prácticamente borrados".

Polo también pidió que se arregle la zona de juego infantil en una situación "deprimente" y que se instalen columpios homologados, así como que se adecente el parque y se coloquen más bancos, pues ahora sólo hay dos.

Los vecinos tampoco están de acuerdo con que se están arrancando árboles con 20 años en la calle Sancho de Cabrera para plantar palmeras.