Capellanías y Charca Musia reclaman más vigilancia ante el temor de que aumenten los robos en los polígonos, tal y como ha sucedido en los últimos días en los pequeños negocios del centro. Ambas zonas industriales coinciden en que es necesario un incremento de la presencia policial y abren el debate de las cámaras de videovigilancia, para ellos la mejor herramienta para combatir los asaltos.

"Toda la vigilancia que haya de más siempre viene bien, más aún con la cantidad de robos que ha habido últimamente", dijeron ayer desde Comercial Solís Márquez, una empresa ubicada en Capellanías. Se refieren a los atracos producidos en los últimos meses en las naves situadas en las últimas calles del polígono, con menor iluminación debido a que se encuentran más alejadas de la carretera.

El gerente de la Asociación del Polígono Industrial Las Capellanías (Apilca), Francisco González, recordó también que la instalación de seguridad privada ayudaría a frenar los robos en la zona, pero insistió en que esta opción no es viable: "Para que haya seguridad es necesaria la colaboración de los socios para poner vigilancia privada. La presencia de la policía ayuda, pero la única solución aquí sería vigilancia privada", insistió González.

En el caso de Charca Musia, los robos están también a la orden del día y la seguridad es uno de los temas pendientes del polígono. "Lo hemos demandado ya tantas veces. Seguridad no es que haya poca, es que no hay ninguna; no se ve patrullar a la policía", aseguró el presidente de la Asociación La Unión de Charca Musia, Juan Burgos. El calificó también el uso de las cámaras de vigilancia como algo "necesario", aunque hizo referencia a que su instalación en estos momentos es "complicada" debido a la crisis económica.

MAS HURTOS EN EL CENTRO Mientras crece el temor en los polígonos por el aumento de los robos, en el centro continúan. La madrugada de ayer la policía local tuvo que actuar por otro asalto en un negocio de la calle Amberes. Ocurrió sobre las 06.00 horas. Al parecer un vecino alertó a los agentes de que un individuo estaba arrojando piedras contra un escaparate. Tras llegar al lugar, las dotaciones verificaron que la luna se encontraba rota. Con las características facilitadas intentaron localizar al presunto autor. Este es el segundo que se produce esta semana y el sexto en menos de un mes. El ayuntamiento ya ha anunciado que se reforzará la presencia de policía en la zona centro.