La diputación prevé tener acabada a finales de este año la rehabilitación de la casa de los Moraga para que pueda acoger el centro provincial de artesanía. La reforma de esta casona, situada en la plaza de Santa María y que data del siglo XVI, es uno de los principales proyectos del gobierno provincial para esta legislatura, y supondrá, con una inversión de 726.000 euros, la adaptación de este espacio para que los artesanos puedan vender y hacer allí sus productos en vivo.

El contenido del proyecto fue presentado ayer por el presidente de la institución provincial, Juan Andrés Tovar; el arquitecto encargado del proyecto, Angel Pizarro, y el constructor Antonio Abreu, de la empresa adjudicataria de las obras. Tovar destacó que la reforma podrá acometerse gracias a una aportación del 75% de fondos europeos y el resto por la diputación e incidió en que su ubicación es la más idónea para facilitar las visitas de los turistas. El edificio, adquirido a Cáritas, tiene una extensión de 500 metros y la obra se adapta al plan especial, norma que regula las intervenciones urbanísticas en el casco histórico.

Por su parte, el arquitecto responsable del proyecto declaró que la casa de los Moraga tiene "un valor relativo" y que la rehabilitación "está encaminada en hacer un edificio totalmente adaptado para que cualquier persona discapacitada". También explicó que se han respetado los volúmenes originales y que, en la fachada, está previsto utilizar materiales como el mortero tradicional de cal, "con elección del tipo de arena para que el tono del mismo lo haga distinto al de otras construcciones". En el interior se revestirá del mismo material, en el que predominará el granito de color beige y la madera.

El arquitecto detalló también la distribución que tendrá cada una de las tres plantas del edificio. En la baja estarán las salas de exposiciones y oficinas, mientras que la alta se dedicará exclusivamente a talleres y exposiciones. La bajocubierta contará con una sala multiusos.

Por su parte, Abreu, que también está rehabilitando el cercano palacio de los Becerra, se mostró satisfecho por acometer la obra y destacó el mal estado en el que está el edificio.