Los vecinos del casco antiguo quieren que la sala Capitol reabra como sala de actividades para el barrio. La sala lleva cerrada meses después de que el ayuntamiento clausurara la actividad a los últimos promotores porque el espacio no tenía licencia para la actividad que pretendían desarrollar los empresarios relacionada con el ocio nocturno.

Tanto residentes cercanos al espacio de la calle Sancti Spiritu situado a unos metros de la plaza de Santiago como el presidente de la asociación vecinal ciudad monumental, Juan Manuel Honrado, coinciden en que «faltan espacios comunes para la gente del barrio». «Nos ilusionamos cuando se reabrió porque supuso una posibilidad de tener un centro cultural en la zona», apunta Honrado, que incide en que la línea a seguir que comparten se asemeja a la que siguieron los promotores de la compañía de teatro Maltravieso y apuesta por un modelo que emule la actividad de un «centro cívico» y que pueda programar «actividades para familias, cine y teatro». «Encajaría como espacio abierto a todos, que genere arraigo y en el que podamos sentirnos a gusto», pone de manifiesto el representante vecinal.

En cuanto al proyecto más enfocado al ocio nocturno que proponían los anteriores promotores, sostiene que solo generará una respuesta negativa en los vecinos «si provoca molestias» y no está «acondicionado e insonorizado». «Al principio se miró con recelo por el tema de los ruidos y porque no queremos que se causen problemas a los vecinos», anota Honrado.

Precisamente esa línea, el ayuntamiento ya se pronunció esta semana y el área de Urbanismo descartó que vaya a conceder el permiso --supone modificar el plan general-- para que se venda alcohol ni se hagan espectáculos porque la plaza Mayor «es zona saturada de ruidos» junto con la Madrila. En la actualidad, tal y como alegó el consistorio, la sala solo tiene licencia como espacio cultural y sala de exposiciones. Esta fue la razón por la que los anteriores empresarios que hace unos meses asumieron la gestión de la sala, abandonaron finalmente el proyecto «porque no tenía garantías de ser viable».

La contrariedad reside en que los anteriores promotores a estos, la compañía de teatro Maltravieso si obtuvieron una resolución favorable para desempeñar su actividad en la sala durante un año antes y para programar conciertos y funciones de teatro.

De momento, el ayuntamiento se muestra abierto a cualquier propuesta pero no dará más pasos hasta que no se resuelva el litigio tanto con los anteriores promotores, tres empresarios de hostelería, como con los últimos por la gestión del centro, la compañía de teatro. Cabe recordar que el espacio pertenece a Fundación Obra Social de Castilla y León (Fundos), una fundación que gestiona el patrimonio de EspañaDuero. Este diario intentó contactar ayer con la fundación para que se pronunciara sobre el futuro del espacio pero no fue posible.