El problema del plomo existente en algunos domicilios de la Ciudad Monumental no parece avanzar hacia una resolución próxima. El ayuntamiento anunció el día 13 que estudia una línea de ayudas para financiar el cambio de las acometidas de plomo que aún permanecen en el enganche de algunas viviendas a la red general. Fue un vecino el que advirtió en febrero de que su casa superaba ocho veces el límite máximo (10 microgramos/litro). Seguidamente, en las primeras 33 casas analizadas por laboratorios a costa de los propios residentes, 16 detectaron plomo y 8 superaban el límite. Una rápida inspección de Canal de Isabel II en 200 inmuebles halló acometidas de este metal en 40.

El ayuntamiento trabaja en un informe técnico que dirima la titularidad de las acometidas. El cruce de normativas es realmente complejo. Por un lado se consideran responsabilidad del titular de la casa, pero por otro el uso del plomo en las tuberías está prohibido desde 1980 y en Cáceres ni siquiera se hizo una campaña de información y localización de estas tuberías previa a 2012, obligada por el Real Decreto 140/2003, de 7 de febrero, antes del cual las acometidas pertenecían a la red pública. Además, en el concurso del servicio del agua de 2010 se establecía que el adjudicatario tendría a su costa «la sustitución de las acometidas».

PRIORIDAD: SU LOCALIZACIÓN / En cualquier caso, los vecinos no conocen aún el resultado del informe municipal ni la creación de posibles ayudas. «Ahora mismo ése no es el problema, hay que ir paso a paso, la prioridad es detectar la ubicación de las tuberías de plomo y luego ya se dirimirá a quién corresponde cada tramo y la posible solución», subraya el presidente de la Ciudad Monumental, Juan Manuel Honrado.

No obstante, en lugar de proceder a esta búsqueda, los vecinos se quejan de que cuatro técnicos del ayuntamiento y Canal han realizado análisis en una decena de inmuebles, con resultados dentro de la normalidad. «Hemos enviado un escrito al ayuntamiento preguntando por el protocolo empleado, ya que parece ser que han dejado correr previamente el agua. No se trata de detectar microorganismos, sino un metal pesado», matiza el presidente.

Canal comunicó el día 12 por escrito que no van a hacer más analíticas «y que si queremos conocer el material de las acometidas, consultemos a un profesional», revela el presidente.

El ayuntamiento sí se ofreció a efectuar análisis gratuitos a través de la farmacia municipal. Hay más de 160 viviendas inscritas, pero los vecinos no darán el paso si no se realizan de manera correcta. «Queremos saber si hay plomo en las casas, eso es lo primero y más urgente», sostiene Juan Manuel Honrado.

El grupo de trabajo creado en la asociación vecinal, formado por profesionales de Farmacia, Química, Bioquímica, Fontanería y Arquitectura Técnica, ha remitido otro escrito al ayuntamiento con sus inquietudes.