La Feria del Dulce Conventual superó el éxito de afluencia del año pasado en su jornada inaugural. Un total de 1.900 personas (600 más que en 2009), según la organización, se endulzaron el paladar en la Preciosa Sangre, donde se exponen y venden las exquisiteces de 15 conventos de España y Portugal. El incremento de visitas fue acompañado por un aumento de las ventas, y los organizadores calculan que la mitad de lo que han comprado este año --han invertido 25.000 euros en productos-- se agotó ayer.

Desde que se abrieron las puertas, a las 11.00 horas, el trasiego de público fue continuo y las bolsas blancas en las que introducían cada compra se vieron a lo largo de toda la jornada por la zona monumental. "Venimos buscando los dulces de siempre, magdalenas de San Pablo, tocinillo de las Jerónimas y un mazapán que compraba mi padre cuando era pequeña y que llamábamos la anguila porque va enrollado", contaba una compradora.

"¿Esto qué es?", "¿Qué lleva?", "¿Cuánto cuesta?", eran las preguntas que repetían los visitantes. En el otro lado del mostrador, Alba González, una de los 30 scouts que colaboran en el desarrollo de la feria confirmaba el ajetreo. "No hemos parado", aseguraba. Los hojaldres del y la miel de frutas del convento de Santa Cruz de Córdoba, y las yemas y tocinillos del Madre de Dios de Coria, eran los más demandados.

MAS OFERTA El mazapán y las angulas del convento de Toledo se agotaron a primera hora de la mañana y por la tarde se acabaron también las existencias de tocinillos de cielo del Convento Madre de Dios de Coria y las lenguas de almendras del Convento de Santa Clara de Zafra. "Es curioso, pero se están vendiendo más rápidamente los productos más caros y los mejor presentados", señalaron desde la organización.

La segunda edición de la Feria del Dulce Conventual patrocinada por el PERIODICO EXTREMADURA y LA CRONICA DE BADAJOZ cuenta con productos de 15 conventos de España y Portugal. Yemas de San Leandro o Santa Clara, trufas, tocinillos, corazones de San Francisco, nevaditos y miel de plátano, melón o albaricoque son algunos productos.

La alcaldesa Carmen Heras inauguró a mediodía la feria. "Hemos incrementado este año el número de conventos y la oferta", afirmó.

En la inauguración estuvieron también presentes las hermanas del convento de San Pablo, a través de una carta de su superiora, Sor Esther, a la que puso voz una niña del grupo Scout San Yago, que colabora en la feria. En ella manifestaban su agradecimiento por esta iniciativa "que nos ayuda a seguir adelante". "Los dulces artesanales que se elaboran en las cocinas de nuestros conventos están hechos con recetas que hemos heredados de nuestros antepasado", añadían. Y suelen ser secretas. En todo caso, el convento de San Pablo es uno de los que este año ha revelado la receta de uno de sus productos "favoritos": bocaditos de almendra, que ayer se elaboraron en el taller de repostería, en el Palacio de los Golfines.