El centro de ocio del antiguo matadero no podrá ser una realidad hasta que la sociedad madrileña Parque de Ocio Las Arenas firme las escrituras que acrediten que los terrenos donde se prevé su construcción son de su propiedad. Ayer, Juan Barroso, uno de los tres propietarios del solar, admitió que el 23 de julio se firmó un contrato de compraventa con Las Arenas, pero que la firma de escrituras aún no se ha materializado.

Barroso forma parte de la empresa Ocio y Recreo de Extremadura, dueña de esa parcela. El empresario indicó que tras la firma de ese contrato de compraventa se abrió a Las Arenas una opción de compra que expiraba el 23 de enero pasado. Según Barroso una semana antes de esa fecha, los promotores madrileños solicitaron una prórroga de un mes, que finalizó el 23 de febrero.

Barroso indicó que en ese tiempo Las Arenas ha tenido discrepancias de carácter económico con sus otros dos socios, aunque señaló que él ya tiene sus papeles en la notaría a espera de que se firme la escritura. "El terreno --dijo Barroso-- de momento no es de ellos porque no se ha consumado la compra". Añadió que dará a Las Arenas un plazo de 10 días para que la operación pueda llegar a buen puerto. "Si no es así, doy la negociación por finalizada", concluyó.

Por su parte, uno de los abogados de la sociedad madrileña que promoverá el centro de ocio confirmó que en julio se firmó un contrato de compraventa con la aportación de una cantidad económica y con el acuerdo de que el resto del dinero se liquidaría en el momento de la firma de escrituras.

El letrado añadió que "están pendientes de pulir unos flecos relativos a las condiciones de pago", aunque fue taxativo al asegurar: "No hay ningún pero que pueda evitar que esta operación salga adelante". El abogado insistió en que se trata únicamente de una cuestión de forma que no paralizará ni perjudicará la iniciativa. El jueves ambas partes mantendrán una reunión. Los promotores de Madrid han entregado incluso al ayuntamiento el proyecto, que fue devuelto para incorporar correcciones que, según los empresarios, ya se han efectuado.