El ayuntamiento aplaza su decisión de peatonalizar la zona centro hasta que no resuelva la construcción de aparcamientos en el entorno. El proyecto municipal no se ejecutará por el momento en Mario Roso de Luna, una de las calles más conflictivas, que enlaza con la plaza de San Juan donde sí está previsto el ensanchamiento de las aceras.
A pesar de ello, el concejal de Movilidad Urbana, José Antonio Villa, anunció ayer que el consistorio acometerá antes de que termine esta legislatura el cierre al tráfico del segundo tramo de Donoso Cortés hasta la esquina con la calle Pizarro. Villa aseguró que este proyecto ya está en manos de la concejalía de Obras.
El plan de actuación para peatonalizar el centro fue abordado hace algo más de una semana por el propio concejal y el alcalde José María Saponi en una reunión mantenida con los empresarios de San Pedro, San Antón, San Juan y Roso de Luna. Según explicó el edil de Movilidad Urbana, la propuesta fue acogida favorablemente por los comerciantes. "Al principio son reticentes pero cuando se les explica, aceptan que el entorno de la ciudad monumental, plaza Mayor y San Juan hay que protegerlo de la agresión continua de la gran afluencia de vehículos y el gran número de estacionamientos", subrayó Villa.
CONSULTA PREVIA
De esta forma, la estrategia municipal antes de cerrar al tráfico las calles del centro se basará en la consulta previa a ciudadanos y empresarios. José Antonio Villa cita como ejemplo las cuatro reuniones mantenidas con los vecinos de la parte antigua antes de implantar el sistema de restricción al tráfico. Afirmó que "no podemos adoptar ninguna solución sorpresivamente. De ellos depende gran parte del entorno".
En este sentido, dejó claro que no se va a peatonalizar el centro si antes el ciudadano "no tiene una garantía de los derechos y de la calidad de vida actuales".
