El centro de recepción de turistas situado en la azotea del párking de Obispo Galarza lleva cerrado desde mayo pasado al haber finalizado los contratos que, con fondos del Plan de Empleo de la Junta de Extremadura, permitían disponer de personal a la Concejalía de Turismo. Según fuentes municipales, a finales de agosto podrían dejar de prestar servicio durante días otras dependencias para los turistas como la Torre de Bujaco, el centro de Semana Santa, el Baluarte de los Pozos o la oficina de información en las traseras del parador al extinguirse los contratos de otros diez auxiliares. Hasta que no lleguen nuevos fondos para contratar personal, la concejalía se verá obligada a realizar ajustes con los trabajadores de los que dispone para atender estos centros.

En el caso del de Obispo Galarza, estaba atendido por dos personas, aunque los turnos tenían que doblarse durante los fines de semana para que pudieran descansar. La atención a los servicios turísticos municipales está cubierta con fondos del plan de empleo desde que se abrió al turismo la torre de Bujaco en el 2003.