Solidarizarse de palabra parece muy fácil, pero de obra... Y eso es lo que han hecho los alumnos del ciclo de Información y Comercialización Turística (FP) de la Universidad Laboral. Sin pensarlo dos veces, los estudiantes han cogido sillas de ruedas y bastones de invidentes para recorrer la parte antigua como si fueran discapacitados... ¡Y vaya si han encontrado obstáculos! Escaleras para acceder a los edificios, letreros a una altura imposible de leer desde las sillas de ruedas, cajeros automáticos muy elevados para personas impedidas, teléfonos idem, inexistencia de folletos en braylle, pavimento histórico intransitable (aquí poco puede hacerse)...

Los jóvenes, guiados por especialistas madrileños del Real Patronato de Atención a Discapacitados, aprendieron así un aspecto muy importante para su futura profesión como informadores turísticos. Pero no todo fue negativo: aplaudieron la existencia de un microbús urbano y de coches especiales para minusválidos.

DE ESCRITORES Y DE SANTOS

Más iniciativas. La Universidad Popular de Cáceres ha puesto en marcha un taller de poesía y relato breve promovido por la Consejería de Cultura, Aupex y la Asociación de Escritores Extremeños. Pretende fomentar y encauzar la creatividad, así como ampliar horizontes para quienes están alejados de los centros y ambientes literarios. Incluye teoría, clases prácticas, encuentros, debates y tutorías personalizadas. Pues nada, el premio Cervantes espera.

Aunque para conseguir lo que uno quiere tampoco está mal encomendarse a las fuerzas divinas, porque toda ayuda es poca... La Cofradía de la Sagrada Cena ha celebrado la novena y la fiesta en honor a San Judas Tadeo y San Simón con venta de roscas en Santiago, mesa de ofrendas e imposición de medallas a los nuevos miembros. Esta hermandad, la más joven de la Semana Santa cacereña, ya suma 1.500 cofrades.