Las detenciones por delitos de malos tratos en el ámbito familiar se han disparado en la provincia. Lo prueba el hecho de que en poco más de un mes --entre el 6 de marzo y el 13 de abril-- la Guardia Civil ha detenido en distintas localidades cacereñas a 12 presuntos maltratadores.

Las cuatro últimas detenciones se han llevado a cabo en tan sólo tres días. En concreto, según la información facilitada ayer por la Comandancia de Cáceres, la primera de ellas se llevó a cabo el pasado día 11 por efectivos de la Guardia Civil de Navalmoral de la Mata, que detuvieron a M. S. G. tras causar diversas lesiones a su compañera sentimental.

Al día siguiente, los agentes de Trujillo realizaron dos detenciones, la de R. F. B., acusado de causar lesiones a su exmujer en el interior de su domicilio, y la de J. J. S. M., por un delito de amenazas contra un familiar y otro de tenencia ilícita de armas.

Por último, en la tarde del pasado martes, día 13, efectivos de la Guardia Civil de Serradilla llevaron a cabo la detención de A. R. D., "que, tras mantener una discusión con su exmujer, causó a ésta diversas lesiones leves".

Estas cuatro detenciones por supuestos delitos de malos tratos se suman a las otras ocho que efectivos de la Guardia Civil habían realizado ya entre el 6 de marzo y el día 5 del presente mes en Sierra de Fuentes, Alcuéscar, Valencia de Alcántara, Montehermoso, Cabezuela, Malpartida de Cáceres, Zorita y Miajadas.

Las víctimas de estos presuntos maltratadores --de entre 19 y 43 años-- suelen ser las esposas, exesposas o compañeras sentimentales, pero también los padres. Este fue el caso del joven detenido el pasado 2 de abril en Alcuéscar, acusado de amenazar a su madre con una navaja.