Las líneas del autobús urbano tuvieron el pasado jueves 6.700 usuarios, son 1.200 más que los que hubo quince días antes, el 10 de junio, pero menos de la mitad que los que hubo el 25 de junio de 2019, cuando subieron al transporte público 14.200 usuarios. Todos estos datos los ofreció ayer el portavoz del gobierno local, Andrés Licerán, cuando avanzó varias cifras sobre el uso de instalaciones municipales. El portavoz animó al uso del transporte público, a no tener miedo a utilizarlo tras las medidas de protección instaladas en los vehículos del servicio de transporte.
El autobús urbano tuvo el pasado año una media diaria de 12.600 viajeros, se alcanzó la cifra de 4,6 millones de usuarios, por encima de la que hubo un año antes, pero aún lejos de los números de hace una década cuando subía de los 5 millones.
El autobús se financia por dos vías. Una es el ingreso por la ven- ta de billetes que pagan los usuarios y la otra es la subvención municipal con la que se atiende el déficit del servicio. Este año, tanto por el tiempo que el servicio fue gratuito como por el descenso que se ha producido en el número de usuarios, el déficit será superior. Ya se preveía un déficit de 3,2 millones de euros en los presupuestos de 2020, cantidad que se incrementará. Desde la Femp se ha pedido al Gobierno ayudas económicas a los ayuntamientos para atender las pérdidas del transporte público.
