POR GEMA GUERRA

Conseguir afianzar los cinco sentidos. Esa fue la máxima de la iniciativa que convirtió a La Vinoteca de Cáceres en espacio para el culto vinícola el pasado miércoles. La propuesta, promovida por los propietarios del local, Jorge Sánchez y Encarnación Polo , consistió en una degustación de vinos exclusivamente por y para mujeres.

La enóloga, con gran solera, más de nueve años en la profesión, Victoria Pons , fue la encargada de dirigir la cata ante unas aplicadas y atentas oyentes.

No obstante, no se trató de una cata al uso. Las asistentes pudieron acompañar los diferentes vinos que recomendó la representante de Bodegas Torres con un menú diseñado por el chef del establecimiento, Marc Mataró , en un fenómeno conocido en argot como 'maridaje'.

Entre las invitadas, Isabel Zaballos asistió acompañada de su amiga Teresa Chamorro , quien ya había asistido previamente a más eventos de este tipo y afirmaba que sentía predilección por los 'tintos'. Las hermanas Marisa y Marilar Cerro , regentes de un negocio hostelero, se preocuparon por saborear detenidamente todos y cada uno de los ejemplares servidos.

Montaña Montero , Nieves Larrazábal y Marifé Márquez coincidieron en elogiar la fusión entre platos. Por el contrario, Mercedes Moruno y Filo Caballero , conocedoras de la industria, se centraron en los aspectos más técnicos. Para Esther Mosquete era la primera ocasión que asistía a un evento de estas características pero, tras finalizar el acontecimiento, aseguró que no será la última vez.

Para La Vinoteca , la temporada no ha hecho más que comenzar. El 10 de octubre está prevista otra cata de vinos, a la que podrán asistir, esta vez, tanto hombres como mujeres, y como la dirección no pretende limitar su ámbito de proyección, propone para el día 24 de octubre una degustación de cervezas de fermentación tradicional. Unanimidad en una mesa que pretende fomentar una experiencia sensitiva a todos los niveles.