Maribel es un todoterreno. Nació en Talavera la real y a sus 31 años enumera de carrerilla todas sus aptitudes: forma parte de la asociación Plena Inclusión de Montijo, lleva cuatro años en la campaña el valor de la diferencia, tres en el programa sobre los derechos de las personas, es experta en lectura fácil y accesibilidad y contribuye desde hace poco en la junta de apoyo del grupo Gadir. «Y ya está», concluye. Su currículum es tan extenso como su naturalidad al recitarlo. Es extremeña, tiene discapacidad intelectual y ayer colaboró -cómo no- con el mismo ímpetu con el que atiende a este diario en la organización del primer congreso estatal de accesibilidad cognitiva al que asistieron más de 400 asistentes. Es activa y activista.
Está capacitada para decidir. De hecho, puede votar tras meses de papeles que garantizan sus facultades para hacerlo. «Un juez te dice que no tienes plenas facultades y eso es una injusticia». Ahora ella ya puede hacerlo, pero reivindica lo mismo para sus compañeros. Tiene muy claro que «se ha avanzado en materia de accesibilidad», pero también asume que queda mucho por hacer. «Cuando vine a Cáceres la primera vez tenía muchas barreras», confiesa. Ahora menos, pero aún quedan. Para eso está ella: para romper con las que quedan y orientar en el paso de instituciones y colectivos. Es validadora, es decir, ella y un grupo de personas con discapacidad intelectual prueban los cambios en las infraestructuras para determinar si son correctos y accesibles.
Alaba la actitud con respecto a la materia en la región. «Es impresionante lo que se hace en Extremadura», destaca. Aboga por romper las «barreras que impone la sociedad» y no sabe si en diez años las ciudades serán completamente accesibles. Al menos así lo espera. Maribel fue ayer una de las responsables de las actividades del congreso que lleva por lema ‘Comprender el Mundo’ y durante dos días descubre en el complejo San Francisco proyectos innovadores con ponencias, entrevistas y buenas prácticas. En la inauguración del congreso han intervenido el director General de Políticas de Apoyo a la Discapacidad del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Borja Fanjul; el presidente de Plena inclusión, Santiago López Noguera; el presidente de Plena inclusión Extremadura, Pedro Calderón. También ha asistido la presidenta de la Diputación de Cáceres, Rosario Cordero; y el presidente de la Diputación de Badajoz, Miguel Ángel Gallardo. Consolación Serrano, directora del Sepad, sustituyó al presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, que se desplazó al lugar del accidente múltiple ocurrido en Galisteo. Fanjul destacó que «es fundamental empezar a dar pasos para aplicar todas las medidas posibles para que todos nos podamos entender mejor». La directora del Sepad ha reconocido que se ha conseguido cambiar el «chip» sobre que la discapacidad no está en la persona sino en el medio.
Por su parte, el presidente de la diputación Badajoz, Miguel Ángel Gallardo, ha destacado este encuentro porque, según ha dicho, es un espaldarazo al trabajo que se está realizando en Extremadura en los últimos 40 años y Rosario Cordero, responsable de la institución provincial en Cáceres, ha agradecido a los colectivos que hayan hecho cambiar las políticas.
Una ruta ‘sin barreras’
En cuanto concluyeron las ponencias, la organización convocó a más de 200 personas en la plaza de Santa Clara para iniciar una ruta accesible por la parte antigua. Personsas con discapacidad intelectual de Novaforma y Aspainca leyeron dos textos en lectura fácil y acompañaron a los guías en el recorrido. Rosa Antolín, coordinadora de la actividad destacó que la pretensión «es darle una oportunidad a la accesibilidad en el turismo». Al recorrido asistió la alcaldesa, Elena Nevado.
Hoy abrirá el congreso José Antonio León, catedrático de la Autónoma. También se darán a conocer otras cuatro experiencia e intervendrán Jaime Armengol, director de EL PERIÓDICO DE ARAGÓN, Óscar Pueyo, Juan Carlos Barrado, de la Junta, Clara Delgado, Jesús Hernández y Pedro Núñez.
