El ayuntamiento vendió al C.P. Cacereño en subasta y a precio de coste los terrenos donde se realizó el campo de fútbol. Son 5 hectáreas que se reparten entre el estadio y los terrenos adyacentes y por las que el equipo pagó 7.783 euros. Una parte de esos terrenos, los 11.180 metros cuadrados que el club quiere recuperar, se cedieron al consistorio para instalaciones deportivas.

El club está obligado a mantener el uso deportivo de las instalaciones que construyó durante un periodo de cincuenta años, claúsula que el equipo intentó modificar hace diez años. Esta condición recogida en el pliego de la subasta garantiza, salvo cambios posteriores, la continuidad de la utilidad deportiva de los terrenos, que están en una zona de expansión urbana, hasta el 2024.