Estoy orgulloso, muy orgulloso de la masiva respuesta de los ciudadanos en los primeros días del novenario". Así de satisfecho se mostró ayer Joaquín Floriano, mayordomo de la Cofradía de la Montaña, al hacer balance del primer fin de semana en que la imagen de la patrona cacereña ha permanecido en la Concatedral de Santa María.

En la semana grande de los actos --mañana tendrá lugar la presentación de los niños, uno de los que más público reúne y que, además, coincidirá con el festivo del 1 de mayo--, el máximo responsable de la cofradía destacó que, desde primera hora de la mañana, todas las misas están llenas, sin que se haya registrado ninguna incidencia reseñable.

Aunque no existen cifras en las que quede registrada esa gran afluencia, Floriano apuntó que ésta se ha visto favorecida durante el pasado fin de semana por actos extraordinarios como la parada militar de la Guardia Real en la plaza Mayor, que también realizó una ofrenda a la patrona. "Todo lo que concierne a la Virgen de la Montaña se llena a tope, sobre todo los cultos", subrayó el mayordomo.

AYUDA Ese respaldo masivo ha provocado que la cofradía aproveche la celebración del novenario para repetir a partir de mañana la campaña de recogida de alimentos que tan gran acogida tuvo el pasado año. "Es la manera que tenemos de colaborar solidariamente con las necesidades que se están pasando. No puede ser de otra manera", indicó Floriano, que recordó que todo lo recogido se canalizará a través de Cáritas Diocesana. El año pasado la ayuda llegó a 11 parroquias. "Esperamos llegar al mayor número posible", apuntó.

A esta iniciativa se unirá también la campaña de donación de sangre que tendrá lugar el próximo viernes en el palacio episcopal, que se repite año tras año. "No solo es solidaridad, sino salvación de vida. Una bolsa puede dársela a tres personas en un momento dado", dijo. Los interesados podrán colaborar a partir de las 18 horas.