Colas desde primera hora de la tarde en el cribado masivo que desde ayer lleva a cabo el Servicio Extremeño de Salud (SES) en el hospital Nuestra Señora de la Montaña. Comenzó a las 15.30 horas y desde minutos antes la fila daba la vuelta al edificio. Hasta el próximo viernes, en horario de 15.30 a 20.00 horas, en este hospital se realizarán test de antígenos a toda persona que lo desee, sin necesidad de presentar síntomas y sin cita previa. Solo será necesario acudir con la tarjeta sanitaria. De momento el SES no ha facilitado datos de cuántas personas se sometieron ayer a las pruebas, pero animan a que acuda el mayor número posible de cacereños, para detectar asintomáticos.

Es la segunda vez que en Cáceres se lleva a cabo un cribado masivo. La primera fue el fin de semana del 30-31 de enero, cuando en el área de salud los nuevos contagios superaban el centenar al día y en la región la incidencia se situaba en casi los 1.200 casos por cada 100.000 habitantes a 14 días. En aquel momento, aunque la curva comenzaba a bajar, la presión hospitalaria estaba en máximos, con 105 ingresados ese fin de semana. En los dos días pasaron por el Nuestra Señora de la Montaña 564 personas para someterse a las pruebas y solo cinco dieron positivo.

El cribado que se lleva a cabo ahora se hace con una situación bien distinta, con la tercera ola superada y los contagios estabilizados. Ayer se notificaron en el área de salud cinco nuevos positivos (tres en la ciudad de Cáceres) y la incidencia en la capital cacereña era de 35,37 casos por cada 100.000 habitantes a 14 días y de 20,81 a una semana. Había además 13 personas hospitalizadas.

Precisamente ese descenso de la presión hospitalaria ha permitido al hospital San Pedro de Alcántara desescalar el plan de contingencia y recuperar la normalidad asistencial. Se ha tomado así la decisión de concentrar a los ingresados de coronavirus en la octava planta para poder dejar libre de covid la primera y la segunda (Neumología y Medicina Interna), las dos que han atendido a los pacientes de esta enfermedad desde que comenzara la pandemia.

Esto ha permitido que ambas especialidades puedan recuperar también su normalidad asistencial, con el ingreso y la atención de pacientes que no están contagiados. Hasta ahora los enfermos de estas especialidades habían sido trasladados al hospital Universitario (libre de covid) o a la octava planta, que desde la segunda ola se ha utilizado como espacio comodín para atender a pacientes no contagiados de distintos servicios, fundamentalmente Cardiología y Neumología (los de Medicina Interna fueron derivados al Unversitario porque esta especialidad también se presta allí).

Antes ya había regresado al San Pedro de Alcántara la planta de Geriatría, que había sido trasladada también al hospital nuevo para hacer hueco en el San Pedro para pacientes covid. Con todos estos cambios el hospital ha vuelto a su actividad habitual, lo que ha permitido a Sanidad recuperar la atención de patologías diferentes al coronavirus y el ritmo normal de los quirófanos, con las operaciones programadas. Durante esta tercera ola no ha sido necesario suspender la actividad hospitalaria como ocurriera en marzo y abril, pero la presión hospitalaria y sobre todo la ocupación de la UCI (la del San Pedro se saturó y hubo que abrir la del Universitario para coronavirus) obligó a retrasar algunas intervenciones.

Por último, se mantiene cerrado el hospital Nuestra Señora de la Montaña, aunque continúa en estado de «prealerta», según confirma Sanidad. Esto significa que mantiene sus instalaciones preparadas y contratado el personal que necesita para atender sus plantas, por si fuera necesario volver a abrirlo. Esta plantilla se encuentra ahora prestando sus servicios en el San Pedro de Alcántara.