Esta vez ha sido la colección Mocaral o lo que es lo mismo: los 417 cuadros que el coleccionista privado Javier García Martín cederá al ayuntamiento. Esa colección provocó ayer la enésima crisis del gobierno municipal cuando el expediente para la firma del contrato de adquisición de la obra por parte del consistorio quedó sobre la mesa en la comisión de Cultura, lo que provocó la airada respuesta del concejal del área y portavoz de Izquierda Unida, Santiago Pavón, y el duro enfrentamiento que protagonizó con el responsable de Foro Ciudadano, Felipe Vela, ante la atónita mirada del resto de grupos políticos y técnicos que ocupaban la sala de comisiones.

Pavón ha sido el intermediario entre el coleccionista y el ayuntamiento para que los cuadros se cedan a la ciudad durante 15 años. Ya la semana pasada, en otra comisión de Cultura, se comenzaron a recopilar los documentos necesarios e informes para la adquisición, pero no estaban todos. Días después, el propio Pavón (teniente de alcalde y socio de gobierno de la alcaldesa, Carmen Heras), convocó otra sesión extraordinaria de Cultura (la celebrada en el día de ayer) en la que tampoco tuvo éxito: la documentación que el concejal llevaba en su carpeta no reunía las condiciones necesarias para su aprobación. Poco antes, la mesa de contratación dejó igualmente aparcado un expediente sobre el amueblamiento de la Casa Mirón, asunto que Pavón también lleva de forma directa.

Las dos negativas no gustaron al concejal, que al término de la comisión de Cultura se levantó de su asiento y, en palabras de José Diego, concejal del PP, comenzó a gritar: "¡Esto se acabó, no aguanto más, se acabó el grupo mixto!", exclamó. Según Diego, aunque Pavón no llegó a insultar a Vela, sí lo amenazó: "le dijo que se iba a enterar". A lo que Vela respondió que "no consentía que lo amenazara. Vamos --añadió José Diego-- que todo acabó como el rosario de la aurora".

Ya por la tarde, Pavón, en declaraciones a este diario, se mostró contrariado porque dos de los asuntos estrella de su concejalía (Mocaral y Casa Mirón) quedaran sobre la mesa, así como la propuesta --el día anterior-- de cesión de terrenos de Proa para construir un centro de Asuntos Sociales, que tampoco fructificó. Y de ello el concejal responsabilizó directamente a Felipe Vela. "En todas estas cosas ha intervenido de manera destacada el señor Vela", dijo.

El teniente de alcalde llegó incluso a declarar que el líder de Foro Ciudadano, que también mantiene un pacto de gobierno con el PSOE, "viene marcando la agenda de la alcaldesa". Y, rápidamente, espetó: "Pues mire usted, la agenda que se la marque su tía".

Acto seguido Pavón recriminó la fuerza , el poder de decisión y el excesivo número de delegaciones que están en manos de Felipe Vela. "Tiene una delegación para el centro de ocio, es delegado de la alcaldía para los párkings, ha sido presidente de la comisión ejecutiva del Consorcio, delegado del Proyecto Intramuros que le facilita generosamente la Junta...".

En definitiva, al líder de IU le parece que quien maneja el cotarro municipal lleva un nombre: el del conocido auditor cacereño. "Maneja más presupuestos que muchos concejales, se han licitado cuatro proyectos de Intramuros y en el 2016 se ha contratado a más gente que en el metro a la hora punta", sentenció.

VUELTA A LAS ANDADAS Pavón aseguró que desde hace meses, en privado, había tratado de "salvar" sus "posibles diferencias" con Vela, pero que le ha sido imposible porque, según él, el portavoz de Foro Ciudadano "juega con la alcaldesa, pero conmigo no juega y si aquellas cosas que no me gustan no las puedo arreglar desde dentro, lo haré desde fuera", avisó.

Pavón se refería ni más ni menos a que no dudará en mostrar su malestar públicamente. El edil ya ha utilizado este método en reiteradas ocasiones, y aunque en los últimos meses se ha mantenido en una posición algo más discreta, ayer rompió su silencio al pronunciar esta frase: "Vuelvo a las andadas, pase lo que pase". Pavón considera que él "intenta que las cosas funcionen bien" frente a la actitud "intolerable" de Vela con el gobierno y con la alcaldesa, a la que "obliga --apostilló-- a tomar aceite de ricino".

"¿Romperá el pacto?", hasta cuatro veces le hizo esta pregunta EL PERIODICO. La primera vez contestó: "Yo no quiero romper el pacto". La segunda dijo: "Ya se verá estos días", a lo que añadió: "Tengo balas en la recámara, tengo medio cuartel de artillería". A la tercera apuntó: "Eso no es asunto mío". Y a la cuarta, concluyó: "Lo que vaya a pasar estos días ya se irá viendo". Pese a su imprecisión, lo que Pavón sí dejó claro es que "este flirteo --se refería a Vela-- conmigo no va". Y añadió: "Pasan dos cosas gravísimas: una que quienes gobiernan no son quienes han elegido las urnas sino una camarilla de funcionarios, y otra que el ayuntamiento está en quiebra económica".

CIENCIA FICCION Vela definió la polémica de "ciencia ficción" y aclaró que la documentación que sobre Mocaral llevó Pavón a la comisión "carecía de los preceptivos informes, no se atenía a legalidad". Vela confirmó que Pavón se puso ayer "hecho un basilisco, se ha puesto a gritar y se ha ido de la comisión". ¿Insultó Pavón a Vela?: "Mejor no contesto a esa pregunta", dijo el líder de Foro, quien insistió en que él se negaba a votar "un informe desfavorable. ¿No es primer teniente de alcalde y adalid de la legalidad?", apuntó Vela.

El concejal dijo que Pavón estaba ayer "especialmente cabreado porque sus informes incumplían de arriba a abajo la ley". Recordó que incluso Lorenzo de la Calle (PSOE) intentó infructuosamente hacer razonar a Pavón y lanzó una lanza en favor de la alcaldesa. "He estado toda la tarde con Carmen Heras, hemos estado trabajando, sin estridencias, entre ella y yo hay una sintonía de trabajo. Y Pavón... que haga las cosas bien".

Por su parte, José Diego (PP) definió como "lamentable" la actitud de Pavón y afirmó que la propia secretaria de la comisión (que es funcionaria) sostuvo que "en absoluto" los informes del concejal de Cultura eran favorables.

CALMA Lejos de justificar a su concejal, la alcaldesa lamentó que Pavón "se ponga a decir esas cosas" y comentó que "solo" se le había dicho que el expediente debe llevar un cauce administrativo porque se trata de un asunto que lo requiere dada su trascendencia. Reconoció que la documentación, tal como está ahora, no se puede llevar al pleno del día 19 como pretendía Pavón. "Nadie le ha ofendido", concluyó.