El diputado socialista en la Asamblea de Extremadura, Luciano Fernández, visitó ayer las instalaciones del colegio Delicias, donde sus padres demandan con urgencia la construcción de un comedor porque sus hijos almuerzan en mitad de un pasillo. Fernández se comprometió a presentar una "propuesta de impulso" en el pleno del próximo mes de marzo para pedir que se ejecute la instalación. Su ayuda se une a la de Víctor Casco, diputado de IU, que estuvo en el centro la semana pasada y que también dijo que presentará una moción en el parlamento extremeño.

La Consejería de Educación advirtió que el comedor no se ejecutará este año por falta de presupuesto y emplazó a 2014, cuando se aprueben los fondos europeos Feder, que estarán vigentes hasta 2020. Aún no se sabe si la obra llegará el próximo año o se retrasará más tiempo. La Asociación de Madres y Padres de Alumnos (Ampa) no se rinde porque considera que la construcción es de carácter "urgente" y estudia alternativas para lograrla. Su intención ahora es que PSOE e IU lleguen a un acuerdo y puedan presentar una moción conjunta en la Asamblea para hacer más fuerza. Otra de las actuaciones que baraja es llevar al parlamento una propuesta de ley de modificación del presupuesto 2013 y que las obras sean "declaradas de urgencia", según explicó ayer Valentín Macías, miembro de la Ampa.

MOCION EN PLENO Por su parte, el grupo socialista en el ayuntamiento presentará mañana en el pleno una moción para pedir las obras en el colegio Delicias.

Por otro lado, los padres del Castra Caecilia se niegan a trasladar a sus hijos a otro centro de la zona en el caso de que la Junta de Extremadura no construyera tres nuevas aulas de cara al próximo año. Los padres alertan de que en el centro ya no hay espacio para todos. Ayer presentaron una petición formal en el registro del gobierno regional para solicitar una reunión con el secretario de Educación, César Díez Solís, a la que asistirán los padres y la dirección del colegio. Una vez celebrado el encuentro decidirán los pasos a seguir, aunque de momento no se han planteado llevar a cabo acciones de protesta. "Nos preocupa que no estén las aulas el próximo año, tenían que haber empezado a construirlas en enero", aseguró Raquel Flores, de la Ampa del colegio de Mejostilla.