Corría el año 1986 cuando nació entre los muros del colegio Licenciados Reunidos la inquietud por llevar a cabo una serie de actos culturales durante los días previos a su patrón, San Juan Bosco. Así se originó la semana cultural, que fue consolidándose cada mes de enero. Ahora se cumplen 30 años de aquella iniciativa, efemérides que coincide con el XXX aniversario de la declaración de Cáceres como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. El colegio ha vinculado ambos hechos y ha diseñado medio centenar de actividades para que los alumnos conozcan el casco histórico y sepan que viven junto al tercer conjunto monumental de Europa, rodeado de una muralla almohade del siglo XII, jalonada por 23 torres.

Los 1.200 escolares (se trata del colegio más numeroso de la ciudad) inundan estos días el recinto intramuros para hacerse fotografías familiares delante de sus monumentos preferidos, describir los rincones más interesantes y zambullirse en rutas didácticas. Todos conocen a estas alturas el palacio de los Golfines, la concatedral de Santa María, la iglesia de San Mateo o el palacio de Carvajal. Las actividades preparatorias comenzaron hace días y desde el pasado viernes las aulas también se han trasladado al Medievo con sucesivas propuestas: charlas, dibujos y exposiciones de fotografías, murales, escudos heráldicos, noticias de las tres últimas décadas....

Los más pequeños juegan a confeccionar tocados y cascos medievales, convertir los pasillos en una sucesión de castillos e incluso disfrutar con los bailes centenarios, mientras el resto asiste a documentales, filmes, actuaciones musicales, talleres de maquetas y conferencias a cargo de Francisco Jiménez Martín y Francisco Mangut. El mejor día para los alumnos será sin duda el jueves con excursiones para todos los ciclos, desde la Ciudad Monumental hasta Italia pasando por Madrid, Granada o Sevilla. Y el viernes, vacaciones en honor al santo patrón.