Muchos recordaron los capones de fray Monasterio, la revolución a la llegada de las primeras alumnas en el curso 81-82, y los novillos en las clases de religión de fray Arévalo con arriesgadas escapadas al Mesón Extremeño. Fue un día de nostalgia en el colegio San Antonio, que ayer celebró una fiesta de reencuentro entre antiguos alumnos para despedirse de su sede actual, en la calle Margallo, donde ha impartido enseñanza desde 1921 a 40.000 escolares, algunos tan conocidos como Pedro Almodóvar o el político Hernández Mancha. El centro estrenará en septiembre nuevas instalaciones, muy modernas, junto a la Nacional 630 y La Sierrilla.

A la cita acudieron unos 200 exalumnos, docentes y autoridades, entre ellas el alcalde, José María Saponi, que fue profesor del colegio. La organización celebró un acto académico, eucaristía, vino de honor, proyección de vídeos históricos, visita al nuevo centro y verbena en el patio de las Tres Culturas.

"Me he emocionado al ver de nuevo las aulas", comentó Guillermo Santamaría, exalumno, rodeado de antiguos compañeros. A su lado, Andrés Borrego rememoraba las excursiones a Arroyo y al zoo de Madrid, y las duchas de verano en el patio. "Yo no olvido la gua-gua azul ni los deportes", añadió José María Solano. Uno a uno, todos rindieron tributo al viejo colegio con sus mejores recuerdos.