No lo quieren ver ni de lejos, y en pintura mucho menos. El color azul asusta a la población cacereña, que se muestra contraria a la posible creación de 1.650 nuevas plazas de zona azul, lo que son los aparcamientos de pago en la vía pública, que se sumarían a las 850 ya existentes. No obstante, la medida aún necesita la aprobación de la oposición.

«Me parece una barbaridad, pero creo que nos lo podíamos haber esperado desde el momento en que se aprobó la construcción del parking de Primo de Rivera», apuntó ayer Javier, conductor habitual y para quien la zona azul no es más que «un modo de sacar más dinero y creo que ya pagamos bastantes impuestos; bastante gasto tiene el coche ya», señaló ayer.

«Trabajo en el centro y ya me parece demasiada la zona azul actual. Si sale adelante vamos a tener que ir derechos a los parkings o comprarnos una plaza de garaje porque no se va a poder aparcar, bien porque no va a haber sitio o bien porque mucha gente no se lo va a poder permitir. Tú imagínate un euro por la mañana y otro por la tarde todos los días», comentó Cristina, de la tienda El Baúl de los Perfumes. Para ella, además, «la ciudad no está preparada para ir en bicicleta, porque ni hay carriles bici suficientes ni los conductores de vehículos respetan a los ciclistas».

Así, para las personas encuestadas por este periódico, con las 850 plazas que existen ahora mismo es más que suficiente. «Me parece fatal. Ya hay muchísima zona azul, estamos hartos de pagar impuestos y encima este no es necesario», remarcó Lourdes. Como ella opina también Javier. «El parking de Primo de Rivera ya ha hecho bastante daño. A los que vivimos en el centro nos están quitando aparcamientos que existían antes», reveló resignado. «Estoy a favor de cualquier tipo de obra en materia de accesibilidad pero sin que perjudique a las pocas plazas gratuitas con las que contamos en la vía pública», concluyó.

En su presentación, uno de los argumentos que utilizó el consistorio para defender la medida es que servirá para «conseguir una mayor rotación en el uso de las plazas de aparcamiento». Sin embargo, la población no tiene tan claro que vaya a funcionar para combatir los problemas diarios que se dan en la ciudad a la hora de aparcar.

«Mi calle es una de las que se va a convertir en zona azul», indicó Rubén, para quien va a suponer un gran molestia. «Yo, por ejemplo, que no tengo garaje y estoy en paro no me lo puedo permitir», añadió. «Esta no es una ciudad preparada para la bicicleta. ¿Qué calles vamos a tener para aparcar sin pagar?», se preguntó ayer Sandra, que prevé que «no vamos a poder coger el coche» y compara Cáceres con Badajoz o Plasencia, «mucho más adelantadas», espetó.

Para residentes

Por su parte, los encuestados por este diario se muestran a favor de la zona amarilla --aparcamiento gratis para residentes en el centro-- en calles como Fuente Nueva, Damas o Consolación. «No vivo ahí, pero veo bien que los residentes en el centro tengan algún favoritismo; me parecería fatal que la gente que vive en el centro no pueda aparcar cerca de su casa», señaló Lourdes.

En la calle Damas vive Lola, que, cómo no, esta a favor de la medida. «Tengo cochera pero no son pocos los días que me aparcan en la puerta y, si no, siempre tengo problemas para salir del garaje por los pivotes que hay enfrente», remarcó.

Como ella Diana, también de la calle Damas, recibió la noticia con satisfacción. «A veces la gente, aunque no se puede aparcar, se ve olbligada a hacerlo de manera ilegal porque no encuentra sitio por ningún lado. Esto ayudaría a que no se produzcan estas situaciones», matizó. H