No hay sitio para aparcar. Tampoco, cuando llega la fecha, encienden luces navideñas en ningún tramo de la calle. Y los acerados y barandillas requieren, dicen, una remozado. Son las demandas de varios de los comerciantes de la calle Camino Llano, en el centro histórico de la ciudad. "La gente se las ve y se las desea para encontrar un sitio en el que estacionar su coche", afirman Ángel y Pedro Pérez, propietarios de Hiperzoo, una tienda de mascotas situada en el número 13 de la vía. Muchos de los dueños de los demás locales secundan esta idea. "Yo tengo incluso problemas con los proveedores porque también hacen falta más zonas de carga y descarga", argumenta David González, de la tienda Dulzia, en el número 7. "Aunque por aquí es muy difícil encontrar algún espacio para construirlos", reconoce.

Julián Pulido, del Herbolario Hierbabuena, ubicado en el 30, también comparte la petición, ya que "el no tener aparcamiento llega a ser incluso fastidioso", y propone las inmediaciones del Helga de Alvear, actualmente en obras, para darle tal uso. Y no es el único en intentar buscar un emplazamiento para ubicar los aparcamientos. "Creemos que al lado de Las Claras podría ser una buena opción. También al lado del Colegio de Arquitectura y aparejadores", confirman Angel y Pedro. Y se expresa en la misma línea Javier Márquez, de Euronics Cáceres, en los números 7 y 9. "En la cuesta de la plaza Marrón se podrían habilitar algunas plazas", dice.

Márquez, además, guarda más demanda para mejorar Camino Llano. "Hay muchas casas que están muy viejas y las fachadas sucias. El ayuntamiento debería obligar a sus dueños a arreglarlas", indica. Igualmente, dice, hay que remozar acerados y bordillos. Y las luces navideñas son otras de las solicitudes más ansiadas en una calle que, según manifiesta María Vaquero, de Todolibros, negocio ubicado también en el número 13, nunca ha logrado disfrutar de ellas. "Yo llevo aquí 15 años y todavía no las he visto. Deberían poner algo. No te digo un resplandor, pero por lo menos que se vea algo de alegría, que la calle parece que está muerta muchos días en esas fechas", concluye. Así mismo, hace hincapié en la necesidad de arreglar las aceras. "Podría pasarse una cuadrilla de vez en cuando a mirar estas cosas porque algunas están rotas".

Pulido, propietario de Hierbabuena, rebajaría el precio de los locales vacíos para "darle más vida a la calle", ya que "muchos se encuentran vacíos". Por último, opina que una menor tardanza a la hora de recibir subvenciones "también ayudaría mucho".