"Si El Corte Inglés se ubica aquí, nos toca la lotería". Eran palabras del presidente de la asociación de comerciantes de la calle San Pedro de Alcántara, Jesús Avila, cuando en el 2004 arrancaba la operación Carmelitas . Ahora ya tiene todas las papeletas para el Gordo, porque el proceso está a punto de su aprobación definitiva. Jesús Avila, como otros muchos empresarios, lleva años esperando el desembarco del gigante, que supone un acicate allá donde se implanta. En Badajoz, el 80% de los clientes que acuden a El Corte Inglés también entran en otros establecimientos.

Una encuesta de la asociación del comercio cacereño desveló en el año 2005 que 700 empresarios estaban a favor de la implantación del grupo en el centro. Desde entonces han reclamado la agilización del proyecto, que parece eternizarse. Sin embargo, el sector sabe que tendrá que modernizarse, adoptar nuevas medidas, como hicieron los comerciantes de Badajoz, que costearon un párking de 4,5 millones de euros.

Y es que todo lo relacionado con El Corte Inglés irradia un gran poder de atracción. Así lo evidencia, por ejemplo, el Centro de Oportunidades de la Mejostilla, que recibió 600.000 visitas en su primer año. Además, en el 2007 ya existían síntomas de subida de precios en los locales del área de las Carmelitas, pese a que el proceso no avanzaba.

El grupo ya tiene presencia en Cáceres con su fábrica textil Induyco, una agencia de viajes, un Supercor y el centro de oportunidades. Desde hace años también se habla de la apertura de una tienda Sfera.