Comienza la toma de declaraciones del caso Madrila a los hosteleros y políticos contra los que se querelló la asociación Cacereños Contra el Ruido por supuestos delitos de contaminación acústica y prevaricación medioambiental, respectivamente. Aunque las citaciones en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 6, que instruye el caso, estaban previstas para el pasado mes de julio, finalmente tuvieron que retrasarse porque la jueza requirió al ayuntamiento toda la documentación con los expedientes de los locales denunciados.

Estos informes no fueron enviados hasta principios del mes pasado a las partes para que procedieran a su estudio durante un mes con el fin de conocer aspectos del historial de cada establecimiento como licencias, renovación de permisos, denuncias administrativas o alegaciones de los vecinos.

A las declaraciones están citados esta mañana los representantes legales de los establecimientos Pasadena, Barroco y Machiavello. A los dos primeros les fue levantada en junio del año pasado la medida cautelar de cierre, mientras el tercero continúa sin actividad desde marzo cuando la Audiencia decretó la clausura temporal.

La importancia de estas comparecencias, a las que también acudirán los abogados de Cacereños Contra el Ruido, es fundamental para que el fiscal decida si se acusa o no del delito a los imputados. También supone un factor clave para determinar si la asociación denunciante sigue adelante en su denuncia contra los establecimientos.

El calendario marcado por el juzgado prevé que el viernes 15 también se tome declaración a los responsables de Latinos, Down y Submarino. El día 18 le tocará a la Bele y la Cuerda.