El taxi, de momento, no sube. La Comisión Regional de Precios desestimó el incremento propuesto por la agrupación local de trabajadores de este sector. La postura del ayuntamiento, que no se ha pronunciado a favor, influyó en el rechazo de la revisión de la tarifa, una decisión que no es definitiva, ya que se dará otra oportunidad a los taxistas si obtienen el respaldo del consistorio, un apoyo que ya han buscado en la Cámara de Comercio, a la que se ha remitido información para elaborar una nueva propuesta de revisión de precios.

En contra de los intereses de los taxistas está que es muy difícil que el gobierno municipal, a sólo un mes de las elecciones, respalde la subida de un servicio público, aunque el consistorio sí hará algunas concesiones al sector, como el incremento de licencias o la revisión de la ordenanza del taxi, dos medidas que se plantearon en la última reunión de la Comisión Municipal de Tráfico.

"Si el ayuntamiento dice que no, no se aprueba", indicaron ayer fuentes de la comisión regional para explicar la decisión de un órgano que preside el director general de Comercio de la Junta y en el que están representados sindicatos, administraciones y las asociaciones de consumidores.

En el primer estudio presentado por la agrupación del taxi se da una imagen del sector bastante preocupante, con unos ingresos netos anuales que apenas superan los 6.000 euros y con unas cifras que hacen pensar en la inviabilidad de este negocio. Estas cantidades se corrigieron en informes realizados por el ayuntamiento, que, en una comisión de Hacienda celebrada a finales de febrero, acordó dejar sobre la mesa la revisión de precios a la espera de más informes, decisión que no vale a la comisión regional, que es competente para aprobar cambios en las tarifas y que no entrará a evaluar una medida impopular para los usuarios si antes el ayuntamiento no vota a favor.

PRECIO PARECIDO EN BADAJOZ

La de Cáceres no es la única tarifa que no se ha aprobado, la comisión también desestimó la revisión de precios de Mérida, aunque en este caso el ayuntamiento ni siquiera remitió informes. Los taxistas de ambas ciudades han defendido una subida de precios que sí se ha autorizado en Plasencia y Badajoz, aunque la tarifa que se aplica en la capital pacense es muy parecida a la que se paga en Cáceres, donde, sin embargo, el taxi no sube desde el año 2000, "que, por lo menos, nos permitan incrementar el IPC", reclamaron ayer fuentes del sector.

La Asociación de Consumidores y Usuarios de Extremadura ha defendido en la comisión de precios la liberalización del sector del taxi para fomentar la competencia y que no esté sujeto a la concesión de licencias por parte del ayuntamiento. Ahora hay 70 permisos, y la intención del consistorio es incrementar las autorizaciones y llegar hasta 78.