Los acusados usaban varios móviles diferentes para contactar con sus clientes y proveedores. En las conversaciones captadas por la policía y extractadas en el escrito de conclusiones provisionales de la Fiscalía, los compradores pedían la droga utilizando expresiones como: "¿Cómo andáis de CDs?" o "Quiero para mañana diez roscas". Los presuntos traficantes de Cáceres quedaban a "tomar café" o a "comer" con sus proveedores en Toledo o Madrid y se decían que "vayas preparando las sardinas y eso".Y y cuando la mercancía era de calidad la comparaban con un Ferrari. Muchos eran clientes habituales, así es que se limitaban a pedir "lo de siempre" o "lo de siempre multiplicado por tres".