NACIO EN CACERES

PROFESION EMPRESARIA

SU NEGOCIO REGENTA LA TIENDA MANSABORA, EN SAN JUAN, DESDE HACE 13 AÑOS, UN ESTABLECIMIENTO DE VENTA DE ARTESANIA Y DECORACION

--¿Por qué Mansaborá?

--A la hora de ponerle un nombre quería ponerle un nombre relacionado con Cáceres. Hemos conseguido que la leyenda se difundiera. Es muy sonoro y mucha gente te preguntaba si era iberoamericano. Un día entró un arabista que me dijo que esta palabra en árabe existía y que significaba el que permanece eternamente.

--¿Qué necesita San Juan?

Esto va muy despacio, en 1992 y 1993 tuvo un auge fuerte, pero luego ha habido un parón, supongo que será cosa de más promoción. No lo sé exactamente qué hace falta, yo creo que es promoción.

--¿Se nota menos el turismo?

--Llega la Semana Santa, y notas muchos visitantes, pero eso a nivel de negocio no es que se note. Al principio se abrieron hoteles de muchas estrellas, era otro público, y ahora es más pasivo, y en la venta de las cosas se nota que ya no es como antes. Ahora es mucho más un detalle o un recuerdo.

--¿Qué es lo que más vende?

--La cerámica está un poco en declive, pero es más la pieza de autor, no la cerámica tradicional, y sobre todo vendes los grabados, y en bisutería también, llevar un detallito, orfebrería de Ceclavín, ese tipo de cosas sí, porque es algo nuestro, pero tampoco se puede decir que haya un artículo estrella.

-¿Tiene apoyos el empresariado del centro?

--Ha sido un error grande llevarse el campus universitario fuera, eso mantenía la ciudad viva, los chavales vivían en el centro, y eso era un tejido vivo, ha sido un error, en otras ciudades la actividad universitaria se mantiene en el centro.