El ayuntamiento cacereño convocará un concurso de ideas abierto a los cacereños y no solo a las empresas para decidir el nuevo diseño de la plaza de Santiago. Así lo anunció ayer el portavoz del equipo de Gobierno, Andrés Licerán, tras la reunión que mantuvo junto a los concejales Jorge Villar y María Ángeles Acosta con el diputado Álvaro Sánchez Cotrina para abordar los proyectos de la Estrategia de Desarrollo Urbano y Sostenible (Edusi) por la Cáceres recibirá seis millones de euros --cinco millones de fondos europeos y 1,2 de Diputación de Cáceres--.

Al término del encuentro, que valoró de forma «positiva», Licerán desgranó en declaraciones a los medios los detalles de la propuesta de Santiago e insistió en la importancia de integrar las propuestas de los vecinos para decidir el futuro de la zona. De hecho, los residentes de la zona organizaron unas jornadas para trazar una propuesta común sobre la plaza hace meses. «Fue una reivindicación de Luis Salaya en la anterior legislatura, pedimos en todo momento que se contara con la asociación de vecinos y los comerciantes y sus propuestas no fueron trasladadas a Diputación, nos parece gravísimo, nosotros sí lo vamos a hacer», puso de manifiesto.

La propuesta del ayuntamiento fue bien recibida por la Asociación de Vecinos del Casco Antiguo, que aplaudió que la administración busque el «consenso» y la «colaboración» a la hora de poner en marcha iniciativas que afectan directamente a los residentes. Según detalló a este diario ayer su presidente, Juan Manuel Honrado, «la plaza debe ser algo que debe decir la gente que vive ahí». En ese sentido, avanzó que emplazará a los representantes de la corporación municipal para abordar esta cuestión. Del mismo modo se expresó también portavoz del equipo de gobierno en cuanto a la línea de colaboración con la diputación para que lleguen inversiones a la ciudad. «Es más fácil trabajar con las administraciones de una manera colaborativa que confrontándonos a ellas, como ya se lo pusimos de manifiesto al anterior gobierno», aseguró.

A la espera del diseño definitivo, el proyecto contempla una reurbanización integral de Santiago y cuenta con un presupuesto de 340.000 euros. El propósito es crear un espacio de convivencia que pidieron los vecinos hace meses después de denunciar situaciones problemáticas en la plazuela como menudeo, gritos o peleas. La finalidad, en cualquier caso, es construir un espacio diáfano y abierto al contrario del actual que cuenta con rincones y espacios con escasa iluminación.