El Juzgado de lo Penal de Cáceres ha dictado sentencia en el caso de los cinco jóvenes detenidos en los disturbios de La Madrila. Para tres de ellos, Alexandre G. G., Modesto P. A., y Fernando C. P., se dictan fallos condenatorios --con penas de prisión y económicas--, mientras que para los otros dos jóvenes procesados, Ignacio R. C., y Fernando S. C. F., se dicta la libre absolución.

La sentencia "no es firme", por lo que los abogados de los tres jóvenes que han resultado condenados estudian presentar un recurso de apelación ante la Audiencia Provincial.

Los cinco jóvenes fueron juzgados el pasado día 8 por desórdenes públicos, daños, resistencia a la autoridad y lesiones, producidos durante los incidentes que tuvieron lugar en la madrugada del 6 de octubre del 2002. Aquella noche, en la que en la plaza de Albatros se construyó una barricada con contenedores, papeleras y otros objetos a la que se prendió fuego, y se produjeron fuertes enfrentamientos con la policía, miles de personas protestaron por el horario de cierre de los bares.

Para los cinco detenidos pedía el Ministerio Fiscal penas de entre un año y ocho meses de prisión e indemnizaciones de 8.450 a 532 euros. En el caso concreto de los dos jóvenes absueltos, solicitaba para cada uno de ellos un año de prisión por un delito de desórdenes públicos, del que ahora han sido declarados inocentes.

A Fernando C. P., el juez de lo Penal le absuelve del delito de desordenes públicos, pero le condena a seis meses de prisión por el de resistencia a agentes de la autoridad, 90 euros de multa por la falta de lesiones y el pago de una indemnización de 360 euros a un agente de la policía local.

Alexandre G. G., y Modesto P. A., por su parte, se enfrentan a las mismas penas. Ambos han sido condenados a seis meses de prisión por el delito de desórdenes públicos, 540 euros de multa por el de daños y a indemnizar conjunta y solidariamente con 1.929,35 euros al Ayuntamiento de Cáceres por los daños causados en contenedores y papeleras, con 8.450,25 euros a la empresa Atesa por el siniestro del coche de su propiedad que resultó calcinado en los disturbios y con 532,05 euros a un particular por daños en su vehículo.

Pese a la proclamación de inocencia que en todo momento, así como durante el juicio, han mantenido estos tres jóvenes, para el titular del Juzgado de lo Penal "resulta probada" su participación en los incidentes y la autoría de los delitos, tanto "por las pruebas testificales de los agentes que les detuvieron como por las pruebas gráficas aportadas".