La policía local intervino el pasado viernes en la denuncia que llegó a la jefatura indicando que un vehículo circulaba a gran velocidad y dando volantazos por la avenida de Cervantes. El coche fue finalmente interceptado en el recinto ferial. Los agentes comprobaron que el conductor no estaba en posesión del carnet de conducir y que le había quitado el automóvil a su abuelo. Por otro lado, ese mismo día se produjo un accidente de circulación en la avenida de Hernán Crotés, donde estaba implicado un vehículo. Su conductor dio resultado positivo en el test de alcoholemia.