Una parcela de la calle principal del polígono industrial de Las Capellanías es el escenario sobre el que se están edificando dos ´pisos laboratorio´, es decir, dos pisos que se están construyendo según criterios diferentes, para comprobar cómo se comportarán sus materiales desde el punto de vista de la eficiencia energética y la sostenibilidad. El consejero de Fomento, José Luis Quintana, recorrió ayer las obras y explicó que de las dos viviendas, "una es la patrón" y la otra "experimental". La patrón es una vivienda normal, "simplemente acorde a los criterios que establece el código técnico de edificación", señaló Quintana, mientras que "la experimental será la que actúe como laboratorio". Esta está construyendo con materiales e instalaciones novedosos y una vez que esté levantada, se investigará en ella "la utilización de elementos que permitan un gasto energético sostenible".

Se trata de una iniciativa del proyecto EDEA, puesto en marcha por la Consejería de Fomento para desarrollar una metodología de diseño y construcción de viviendas bajo criterios sostenibles, con el fin de aplicar sus resultados en las actuaciones desarrolladas en la política de vivienda de Extremadura. El proyecto cuenta con una inversión de 2,3 millones y consta de tres fases de las que se ha terminado la primera, consistente en conseguir patronos que colaboren en la iniciativa. "Ahora se está llevando a cabo la segunda con la construcción de las de las dos viviendas, de las que en estos momentos está en pie la estructura", precisó Quintana; y la tercera se iniciará una vez que se termine la construcción de ellas, que está previsto que sea en torno al mes de mayo. Ambas viviendas tienen 90 metros cuadrados y la misma distribución, para que el comportamiento de las dos se estudie bajo los mismos criterios.

"Intentaremos buscar la eficiencia energética y la rentabilidad económica en todos los resultados del comportamiento que tengan una y otra vivienda", precisó el consejero, que matizó que los pisos no estarán habitados, para que los hábitos de las familias no afecten al comportamiento de los materiales.

La intención es que el proyecto se prolongue en el tiempo. "El estudio en estas viviendas puede llegar a ser permanente, porque pueden salir nuevos materiales a utilizar en la vivienda experimental para comprobar su eficiencia", dijo Quintana.