Las familias afectadas por la paralización de la máquina de radiología en Cáceres continúan con sus protestas. El Servicio Extremeño de Salud (SES) no ofrece este tratamiento en sus hospitales y lo tiene contratado a través de la clínica privada San Miguel. Sin embargo la máquina no funciona a pleno rendimiento y por el momento con ella no se podrá ofrecer el inicio de los tratamientos, sí los que ya han comenzado. La razón es un fallo en el aparato, que impide llevar a cabo los tratamientos más fuertes, como son los que tienen que empezar.
Ante esta situación el SES ha tomado la determinación de derivar a Plasencia, Mérida y Badajoz a ocho enfermos urgentes, sin embargo aún no han podido comenzar sus sesiones. Es el caso de la madre de José Segura, que tiene 53 años y lucha contra un cáncer de mama. Ayer fue a Plasencia. «Nos han dicho que podría empezar después del puente de octubre o como muy pronto el día 10, pero mi madre no puede esperar tanto», insiste su hijo.
Le han prescrito 30 sesiones pero su oncólogo les recalcó la necesidad de que las mismas debía comenzar a recibirlas como máximo al mes o al mes y medio de que finalizara con las de quimioterapia, que acabó el 14 de agosto. No ha podido ser porque la máquina de la clínica San Miguel se ha estropeado, pero el tiempo juega en su contra.
Harto de la situación, él y otros afectados más han comenzado a recoger firmas a través de la plataforma on line ‘Change.org’, en día y medio han logrado más de 1.600 adhesiones. Y han recibido decenas de llamadas de enfermos y familiares que atraviesan por la misma situación. Advierten de que, de no solucionarse el problema de manera urgente, llevarán a cabo manifestaciones y protestas en la calle.
Por su parte el portavoz del equipo de Gobierno de Cáceres, Rafael Mateos, denunció ayer que la Junta de Extremadura tiene a la sanidad cacereña en «el abandono más absoluto». Recordó que en la provincia de Cáceres residen el 40 % de los extremeños y que «esta situación es ya insostenible» y supone «una merma en la calidad de los servicios que se prestan para los cacereños».
